QUITO, 25 de enero.— La decisión del Congreso de analizar la propuesta
de consulta popular, que pide la instalación de una Asamblea
Constituyente, atiza el rechazo de las organizaciones sociales hacia
grupos de poder en Ecuador.
Movimientos indígenas y populares advirtieron al Parlamento y
Tribunal Supremo Electoral (TSE) que habrá una rebelión en el país, si
intentan bloquear el referendo y la Constituyente, precisa un despacho
de PL.
Este anuncio ocurrió después de que líderes de esas agrupaciones
dialogaran con el ministro de Gobierno Gustavo Larrea y analizaran las
próximas acciones a acometer, luego de que el ente electoral acordó
enviar el plebiscito al Parlamento.
Los indígenas y otra treintena de gremios sociales forman desde
inicio de este año un "frente social de presión" para impedir que el
TSE o el Legislativo acorralen la Constituyente, y además llamaron a
las formaciones políticas de izquierda y sus bases a incorporarse a
las protestas contra el Congreso para "decirles a los corruptos que la
voluntad del pueblo se debe respetar porque es el único soberano".