Con la premier del teledrama Obscena intimidad, escrito
por Elena Palacios y bajo la dirección de Magda González Grau, la
primera jornada, ayer en el cine La Rampa, del III Festival Nacional
de la Televisión tuvo un momento de significativo interés artístico.
Se trata de una obra en cuatro partes que refleja ángulos
complejos de la realidad, zonas oscuras de la pareja y otras
interrogantes de la vida en familia cuyas respuestas, más que
sugeridas, se dejan a la reflexión.
Mediante un elenco de veteranos (Yolanda Pujols, Rogelio Blaín) y
noveles, actuaciones creíbles, ágiles y plásticos movimientos de
cámara y una edición en contrapunteo con la realización, Magda
González Grau demostró cuánto se dice mediante la imagen, el sonido
y el movimiento para no caer en recurrentes e innecesarios
verbalismos.
Antes de esta proyección, se efectuó el acto inaugural del
Festival, en el que se resaltó la multiplicación del medio como
instrumento de información y cultura con la ampliación del sistema
de telecentros. A lo largo del país Cuba se encuentran transmitiendo
actualmente 30 nuevos canales de televisión y 71 corresponsalías
municipales.
Al intervenir en el foro, que contó con la presencia de Rolando
Alfonso Borges, jefe del Departamento Ideológico del Comité Central
del Partido, Ernesto López, presidente del ICRT, aseguró que la
infraestructura tecnológica de la televisión "marcha acorde con los
recursos económicos" del país, y se renovará paulatinamente.
En el proceso de perfeccionamiento a la televisión dijo "que
procede estrechar más las relaciones con las instituciones y
organizaciones afines, que tienen incidencia en la creación, la
realización y transmisión de la programación".
El presidente del organismo mencionó entre esas instituciones, en
primer lugar, al Ministerio de Cultura, en torno a lo cual se
refirió a un Plan Conjunto suscrito recientemente entre ambas
partes, "proyecto integrador en el cual hemos depositado toda
nuestra confianza y merece toda la atención en todos los niveles",
dijo.
También citó en ese sentido cooperador al Ministerio de la
Informática y las Comunicaciones y caracterizó de "inestimables
estrechos vínculos" los que deben sostenerse con la Unión de
Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), la Unión de Periodistas de
Cuba (UPEC), la Asociación Hermanos Saíz y, en los territorios, con
los Órganos Lo-cales del Poder Popular.