El ministro de Relaciones
Exteriores iraquí, Hoshyar Zebari, afirmó hoy que los cinco iraníes
apresados la víspera por fuerzas estadounidenses en Erbil, norte,
realizaban laborales autorizadas por su gobierno.
Esas personas trabajaban en una oficina de enlace entre la
República Islámica de Irán e Iraq bajo el consentimiento del gabinete
del primer ministro, Nuri al Maliki, aseguró.
Subrayó que en estos momentos se espera la confirmación del
ejecutivo para que esa sede sea convertida en consulado, lo cual sería
reciprocado con otro centro similar del país árabe en Teherán.
En sus declaraciones a medios de prensa, el canciller iraquí
rechazó que Estados Unidos quiera convertir a Iraq "en campo de
batalla para zanjar disputas con otros países".
Las declaraciones de Zebari contradicen un comunicado emitido por
el ejército norteamericano en que se acusa a los detenidos iraníes de
estar implicados en ataques contra civiles iraquíes y las fuerzas
militares.
Este jueves, efectivos estadounidenses asaltaron el inmueble
ubicado en la ciudad de Erbil, en el norteño Kurdistán, y sustrajeron
documentos y computadoras, informó la embajada de Irán en Bagdad.
El salto a la oficina iraní ocurrió a pocas horas de que el
presidente estadounidense, George W. Bush, anunciara el envío de otros
21 mil 500 militares al país árabe y acusara a Teherán de promover el
terrorismo en Iraq.
De otro lado, un funcionario de la oficina del clérigo chiíta
Muqtada al Sadr en la ciudad de Najaf rechazó la nueva estrategia de
Bush y vaticinó su fracaso.
Abdul Razzaq al Nidawi, partidario del líder religioso, subrayó que
los problemas de su país son consecuencia de la ocupación
norteamericana, por lo que pidió la pronta retirada de las fuerzas
extranjeras.
El pueblo de Estados Unidos debe oponerse al envío de más de sus
hijos para que no retornen en ataúdes, señaló.
En tanto, más de una treintena de personas fueron secuestradas en
la provincia de Diyala, noreste de Bagdad. Se estima que 11 de ellas
son trabajadores del Ministerio del Petróleo iraquí.
Al abundar sobre el tema, la televisora local Rafidain añadió que
los plagios ocurridos en diferentes lugares de esa localidad son
perpetrados por las milicias chiítas.
Otro incidente tuvo lugar en Mosul, norte, cuando hombres armados
asaltaron la casa del ex alcalde de Baaj y le dieron muerte a él, a su
esposa e hijo, dijo la policía.