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El gobierno de Guatemala exigió hoy a la administración de George W.
Bush una investigación por los maltratos de autoridades migratorias de
Estados Unidos hacia los connacionales repatriados.
Gert Rosenthal, canciller del país, dirigió una nota de protesta a
la embajada de Washington en esta capital, en la que solicita se
investiguen las denuncias de los deportados, confirmó la viceministra
de Relaciones Exteriores Marta Altolaguirre.
Hay testimonios de atropellos en los centros de detención
norteamericanos, incluida la confiscación de bienes personales de
nuestros compatriotas, declaró a la prensa la vicetitular de la
cancillería.
La funcionaria fue enfática en el rechazo a la forma de actuar de
las autoridades migratorias estadounidenses, e insistió en impugnar
los procedimientos empleados con los guatemaltecos al ser detenidos y
sujetos a deportación.
Repatriados entrevistados, tras su arribo a la nación
centroamericana, acusaron a Estados Unidos por haber sido despojados
de sus pertenencias, incluidas joyas y dinero, antes de ser devueltos,
destacó en su edición digital el diario La Prensa Libre.
A propósito del recrudecimiento de la política migratoria de la
Casa Blanca, fuentes diplomáticas nacionales revelaron que sus
coterráneos viven aterrorizados en Estados Unidos ante la posibilidad
de ser deportados, aunque tengan la documentación en regla.
"Están creando un Estado de terror. La gente está encerrada en su
casa y ni abre la puerta para salir a comprar los alimentos por miedo
a la policía, recalcó en diciembre pasado José Barillas, cónsul de
Guatemala en Houston.
Washington deportó unos 17 mil guatemaltecos en el 2006, muchos de
los cuales tenían más de una década de radicar en la "promisoria
tierra", donde se calcula reside más de un millón.
Suficiente daño ha sido causado, lamentó recientemente Rosa
Rosales, presidenta de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos
en EE.UU.
Rosales comparó lo que está sucediendo, con la Alemania nazi,
cuando acorralaban a los judíos y los encerraban en campos de
concentración".
Para medio millar de guatemaltecos, el debut de 2007 tuvo como nota
oscura la expulsión de la nación norteña.