WASHINGTON, 18 de
noviembre (PL). — El líder demócrata del senado
estadounidense, Harry Reid, confirmó hoy que su partido quiere
insuflar un cambio de dirección en el Congreso y en la política
exterior norteamericana.
De acuerdo con Reid, los políticos opositores a la Casa Blanca
desean reforzar el debate bipartidista, y al mismo tiempo añadir más
transparencia y vigilancia al curso de las guerras interventoras de
Washington en el Medio Oriente.
Los últimos años que los republicanos controlaron la Casa de
Representantes y el Senado han demostrado cómo un partido político
puede accionar en el Congreso y no lograr absolutamente nada, comentó
Reid.
Ambas cámaras legislativas llevan casi un lustro de menosprecio a
importantes desafíos nacionales como los planes de salud, los
problemas de energía, la macroeconomía y sobre todo la conflagración
en Iraq, apuntó el senador.
Los demócratas ganaron la mayoría en el Senado y la Cámara baja
luego de las recientes elecciones parciales, y por ende el congresista
de Nevada devendrá jefe parlamentario en enero próximo.
Como resultado de los comicios del 7 de noviembre, el llamado
partido del asno obtuvo 51 puestos del Senado y recogió por lo menos
29 asientos de la Casa.
En su conversación con reporteros, Reid requirió al actual gobierno
del presidente George W. Bush a fomentar nuevas restricciones éticas
para legisladores y dictar un compromiso de responsabilidad fiscal.
Principalmente ahora, trabajando juntos, debemos enfocar nuestra
destreza asambleísta en hacer retornar las tropas estadounidenses de
Iraq, concluyó el senador.