BOQUETE, PANAMÁ, 18 de noviembre
(PL). — El VII Encuentro Nacional de Solidaridad
con Cuba continúa hoy en la occidental provincia panameña de Chiriquí,
centrado en la lucha por la liberación de
cinco cubanos antiterroristas presos en Estados Unidos.
Con una actividad político-cultural, el evento fue inaugurado
anoche con la asistencia de delegados de ocho de las nueve provincias
del país, y diversos invitados.
Entre ellos, el embajador cubano en Panamá, Carlos García, y el
presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, Sergio
Corrieri.
La presidenta de la Coordinadora Nacional de Solidaridad con Cuba,
capítulo Chiriquí, Enith González, afirmó que la reunión servirá para
trazar estrategias en la lucha contra el bloqueo y otras acciones
criminales de Washington contra La Habana.
Estamos muy orgullosos de ofrecer nuestra solidaridad al pueblo
cubano, por lo que representa para el mundo, agregó.
La activista citó los logros de la Revolución en materia de salud,
educación y seguridad social, así como la colaboración de la isla con
otras naciones.
González denunció la "injusticia del gobierno estadounidense contra
los cinco cubanos", quienes, dijo, representan con dignidad a su
pueblo.
Pese a la ola de calumnias y mentiras propagadas por la Casa Blanca
y sus aliados, esa isla es un faro para todas las naciones pobres,
aseguró.
Por su parte, la presidenta encargada de la Coordinadora Nacional
de Solidaridad con Cuba, Adria López, expresó que el foro permitirá
aportar ideas para fortalecer la solidaridad y el apoyo a Cuba.
La máxima dirigente de la organización, Lupe Sandoval, manifestó a
Prensa Latina que el evento está dedicado a los cinco jóvenes
antiterroristas.
La administración de George W. Bush no tiene moral para hablar de
una campaña contra el terrorismo, porque mantiene encarcelados a
Gerardo Hernández,
Fernando González,
Ramón Labañino,
Antonio Guerrero y
René González, subrayó.
Sandoval expresó que el foro tiene como objetivo primordial
fortalecer en Panamá los comités pro liberación de los Cinco, como se
les conoce en el mundo.
Durante tres días los participantes abordan asuntos de la
actualidad cubana, así como los daños del
bloqueo
económico, financiero y comercial impuesto a La Habana por Washington,
desde hace más de cuatro décadas.