La ONU condenó hoy el asesinato de
Safia Annajan, directora de Asuntos de las Mujeres en la sureña ciudad
afgana de Kandahar, y expresó consternación por tan insensible hecho.
Annajan fue tiroteada frente a su hogar cuando se dirigía esta
mañana hacia su trabajo.
Voceros de la Misión de Asistencia de la ONU en Afganistán citados
en esta sede mundial destacaron que ella simplemente laboraba para
asegurar la igualdad de las afganas en el futuro de esa nación
asiática.
Según esas fuentes, pese a la tensa situación de seguridad en
Kandahar, organismos de la ONU como el Fondo para la Infancia y el
Programa Mundial de Alimentos han almacenado numerosos productos antes
de la llegada del invierno para ayudar a la población.
Entre los artículos aparecen mantas, ropa abrigada, medicamentos y
otros utensilios para unas mil 500 familias, al tiempo que también se
han depositado más de 320 toneladas de alimentos en Kandhahar y en la
provincia de Helmand, suficientes para tres mil afganos.
Otro organismo que labora en el sur de Afganistán es el Alto
Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, que ofrece
materiales para levantar hogares para unos 30 mil afganos como parte
de su esfuerzo de reintegro de quienes han regresado al país.