Pronósticos mixtos coexisten sobre
las posibilidades reales de formación de un gobierno de coalición en
la autonomía palestina, que será negociada hoy por el presidente
Mahmud Abbas y el primer ministro Ismael Haniyeh.
Medios palestinos anunciaron que Abbas se trasladará hoy a la
Franja de Gaza para entrevistarse con Haniyeh en un nuevo esfuerzo por
acercar las respectivas posturas, separadas por el abismo del
reconocimiento de Israel.
El Presidente es líder del movimiento Al Fatah, mayoritario en la
Organización para la Liberación de Palestina (OLP), creado por el
extinto Yasser Arafat, y aceptó a principios de la década de los 90
eliminar de su Carta el propósito de liquidar a Israel como estado.
Haniyeh, cuya organización Hamas ganó el gobierno en las elecciones
de enero último, rehúsa adoptar la misma decisión y a lo más que ha
accedido es a conceder a Tel Aviv una tregua de 10 años.
La negativa de Hamas (fervor, árabe) ocasionó que los donantes
internacionales cortaran su ayuda a la Autoridad Nacional Palestina lo
que ha causado la virtual parálisis del gobierno autonómico incapaz de
pagar sus haberes a los empleados públicos.
El objetivo de Abbas resulta muy cuesta arriba pues la base popular
de Hamas descansa en los elementos más radicales de la población
palestina, en especial los residentes en la superpoblada Franja de
Gaza, los que más sufren la ocupación israelí.
Semanas atrás un acuerdo para la formación del gobierno
bipartidista parecía inminente, sobre la base del llamado Documento de
los Prisioneros, pero naufragó después que Haniyeh afirmó que Hamas
nunca reconocería el derecho a la existencia de Israel.
El Documento de los Prisioneros, elaborado por dirigentes
palestinos de todas las tendencias encarcelados por Israel, plantea la
creación de un estado palestino independiente y la retirada de Israel
a las fronteras de junio de 1967.
La formulación implica una admisión tácita de la legalidad de
Israel como estado y, por lo tanto, su reconocimiento como tal.
Abbas planteará ante sus interlocutores la necesidad de satisfacer
las demandas internacionales, en alusión a la admisión de Israel,
además de la renuncia del recurso a la violencia.
Horas atrás el Mandatario admitió que los esfuerzos para la
creación del nuevo equipo están en el punto de partida, en medio de
nuevas fricciones El Fatah-Hamas, después que Abbas anunciara ante la
ONU que existía acuerdo para la formación del nuevo Gabinete.
Sin embargo, medios enterados consideran que, de no existir base
mínima para el entendimiento, el Presidente se abstendría de
desplazarse a la Franja de Gaza.