.— Luis Alfonso Santos, obispo de
Copán, fue amenazado de muerte por oponerse a la contaminación
propiciada por las transnacionales mineras que operan en este país,
denunciaron hoy fuentes locales.
Igual que el obispo mártir de El Salvador, Oscar Arnulfo Romero, el
prelado hondureño podría ser victimado por interés de las empresas
extranjeras, alertó el ex rector de la Universidad Nacional Autónoma
de Honduras, Juan Almendárez.
Algunos empresarios capitalinos están hablando de causarle la
muerte al obispo por su participación social en la Alianza Cívica por
la Democracia, comentó.
Esta organización no gubernamental agrupa a indígenas, educadores,
estudiantes, campesinos y otros, que con distintas acciones demandaron
la atención de la administración de Manuel Zelaya a la crítica
situación en que viven.
El también director del Centro de Prevención y Tratamiento de
Víctimas de la Tortura explicó además que Santos participó en
distintas tomas de carreteras con integrantes de este grupo social.
En nombre de estos y de su comunidad, el religioso demandó además
la atención del gobierno a los problemas que atraviesan los habitantes
de esta región, la más depauperada de Honduras.
Santos es el encargado de la diócesis de Copán, situada a unos 500
kilómetros de esta capital y rodeada de etnias indígenas lencas y
chorties en su mayoría, todas en condiciones de extrema pobreza.
El ex director del centro de altos estudios metropolitano solicitó
además la realización de una campaña internacional de solidaridad con
el prelado, a quien comparó con los defensores de la opción por los
pobres.
Almendárez recordó el asesinato de Romero, arzobispo de San
Salvador y uno de los representantes más conocidos a nivel mundial de
la Teología de la Liberación, ocurrido en 1980 por defender a los
menos favorecidos.