La inversión en siete nuevas panaderías de una eficiente
tecnología, procedente de la República Popular China, permite alcanzar
producciones por encima de las ocho mil unidades por jornada en la
central provincia de Cienfuegos.
Más de 40 mil sureños han sido beneficiados con la instalación de
equipos de para la producción del pan los que propician un
significativo ahorro energético a la economía, y mejoran la calidad de
un producto tradicional para la familia cubana.
La electricidad como fuente energética ofrece la ventaja de
eliminar la utilización de otros combustibles que cambiaban las
propiedades organolépticas, como olor, color y sabor del producto
final.
Con la nueva tecnología los elaboradores no participan directamente
en el mezclado de la masa, por lo que ni siquiera se compromete la
higiene de los uniformes, y además disminuye el riesgo de accidentes
de trabajo.
Todavía en fase de comprobación, el ritmo productivo se acelera en
la medida que los operarios ganan experiencias con los modernos
equipos adquiridos por Cuba a través de los convenios de colaboración
pactados con la nación asiática.
Tanto la población como quienes laboran en los renovados centros de
la Empresa Provincial Alimentaria, tienen criterios coincidentes sobre
un progreso cualitativo y esperan la generalización del montaje, según
el proyecto establecido, mediante el cual se prevé ubicar en
Cienfuegos unos 50 módulos.