Un equipo muy pintoresco
Casos y cosas... a los nueve años de edad
RAFAEL PÉREZ VALDÉS
rafael.p@granma.cip.cu
En
este equipo de béisbol ocurren cosas desacostumbradas. Hay incluso
quien todavía se chupa un dedo. Uno de ellos se despertó por la
madrugada, se paró sobre la parte superior de la litera y comenzó a
regar el pipi hacia los alrededores. A partir de ese día,
cariñosamente, es conocido como El Bombero.
Todo eso, y más, sucede en un grupo categoría 9-10 años de edad
que se ha preparado con esmero para asistir al "mundialito de
América", a disputarse en Sucre (Venezuela), a partir de mañana.
Y hay que escucharlos hablar: a veces tienen cosas propias de la
edad, y en otras muestran una madurez sorprendente...
"Me siento bien. Espero ganar, y hacerlo todo bien. Me gusta ser
receptor porque es una posición que lleva mucho trabajo. Tengo que
hacer varias cosas", nos dijo en la Ciudad Deportiva el espigado y
corpulento capitalino Fabián Peña, uno de los dos candidatos a
cuarto bate, quien compartirá los arreos con el "veterano"
villaclareño Lifranq Domínguez (el reglamento exige que los
enmascarados alternen cada día).
Domínguez, uno de los dos repitentes de la selección que compitió
en el 2005, sacó a relucir su experiencia:
"El equipo de este año es más fuerte. La otra vez solo perdimos
contra Venezuela, 6-5, por culpa de los árbitros: ¡todos eran
venezolanos!"
Y el otro repitente lo encierra todo en su nombre... Víctor
Víctor Mesa, hijo, claro está, del estelar ex pelotero. El niño al
parecer se demora un poco más que el padre en contestar: "Empecé a
jugar a los seis años. ¿Por qué jardinero central? Me gusta esa
posición, y mi papá antes era jardinero central. Yo creo que sí, que
puedo ser mejor que él, si continúo como hasta ahora."
¡LLEGARON LOS UNIFORMES!
Han
quedado 18 jugadores, de una preselección inicial de 60, que
tratarán de llegar a la corona, tras los segundos lugares en dos
ediciones anteriores. La distribución por provincias resultó así:
siete capitalinos, cinco villaclareños, tres habaneros, además de un
espirituano, un matancero y un granmense.
Otros puntales pudieran ser un trío de infielders: el tercero en
la alineación, Yordi Roselló (CHA); Alejandro Duviel (VCL) — empuña
a la zurda—, y el otro posible cuarto bate, Ronald Bolaños (LHA):
"Sí, quizás ser cuarto me preocupa, al igual que el avión, pero eso
lo voy a vencer bateando", indicó.
La nómina es completada por los jugadores de cuadro: Hosuán Viera
(CHA), Reynaldo Gutiérrez (CHA) y Mario Luis Rodríguez (SSP); los
jardineros Marvin Martin (VCL), Marlon Cairo (CHA), Adrián Vega (GRM)
y por los lanzadores: Roberto Matos (VCL), Andy Sánchez (CHA),
Yanier Campis (MTZ), Alexander Roque (LHA), Daniel Llanes (CHA) y
Raimel Pérez (LHA).
El director, repitente, es Raúl Rodríguez (CHA) y los asistentes
Everaldo Pedroso (VCL) y Miguel Blanes (GRM). En los entrenamientos,
dos jornadas de 8:00 a.m. a 7:00 p.m., también participaron Jorge
Alberto Salazar y Osvaldo Montalvo. Claro... en las gradas
estuvieron los padres que pudieron. Entre ellos dos madres han
tenido la responsabilidad de cuidarlos a todos: Zoila Cañer y
Maritza Suárez.
Entonces llegó la feliz entrega adelantada de los uniformes, para
tirar las fotos. Los comenzaron a ver desde lejos: "¡Son azules!",
decían unos. "¡Son rojos!", gritaban otros (prevalecen ambos
colores, dependiendo el de visitador o de home club).
Y a la sazón, observando esa alegría, nos vino a la mente una
frase que si no hubiese existido habría que haberla inventado en ese
momento: ¡Se veían como niños con juguetes nuevos! |