BEIJING, 22 de agosto (PL).— El presidente
venezolano, Hugo Chávez, llegó hoy a esta capital en visita oficial de
cinco días, durante la cual se firmarán importantes acuerdos
económicos bilaterales.
El mandatario, que cumple una invitación de su homólogo chino, Hu
Jintao, se entrevistará con su anfitrión y con los principales
dirigentes del gigante asiático.
Chávez arriba en un momento de gran auge en las relaciones
económicas de Venezuela con China, país al que está suministrando unos
150 mil barriles diarios de petróleo, cifra que pudiera aumentar en
los próximos meses.
La nación asiática, cuyo ritmo de crecimiento bate récords
constantemente, es una gran importadora de hidrocarburos y de
productos refinados.
Tan sólo durante el primer semestre de 2006 sus importaciones de
productos energéticos ascendieron a 36 mil millones de dólares, con
más de 70 millones de toneladas de crudo y 12 millones de toneladas de
refinados.
Esta es la cuarta estancia del presidente venezolano en China desde
1999.
Durante este lapso los vínculos bilaterales se han vuelto cada vez
más estrechos, en tanto que los intercambios comerciales sobrepasaron
en 2005 los dos mil millones de dólares.
En esta ocasión se les dará un nuevo impulso, con nuevos acuerdos
no sólo en el campo de la energía, sino también en la agricultura, las
telecomunicaciones y la infraestructura.
Venezuela va a adquirir en China varios buques-cisterna para la
transportación de petróleo, como una forma de lograr una mayor
independencia en la comercialización del producto que más ingresos le
aporta.
El objetivo expresado por Chávez es que su país pueda contar con
una flota petrolera propia y se ahorre el pago de los fletes de
buques-cisterna.
Existe la posibilidad de que los dos países comiencen a explotar en
forma conjunta yacimientos de petróleo en el lecho marino.
Venezuela quiere adquirir en China 12 plataformas para la
perforación de pozos y plantea ensamblar en el país sudamericano otras
12 en una instalación mecánica que funcionaría como una inversión
mixta.
Se espera que Chávez visite el centro donde se realiza el montaje
de un satélite de comunicaciones, que con el nombre de Simón Bolívar
será lanzado al espacio por un cohete chino en 2008.
En el plano político, según fuentes diplomáticas, las dos partes
conversarán sobre las relaciones bilaterales y acerca de los problemas
regionales e internacionales a los que ambos prestan mucha atención.
Después de visitar el territorio chino, el presidente venezolano
viajará a Malasia y Angola.