Paralizado centro de Ciudad de México
CIUDAD DE MÉXICO, 31 de julio.— La ciudad de México quedó paralizada
al reanudarse las actividades del lunes en el centro de la capital,
cuyas arterias seguían bloqueadas tras los actos del domingo por
simpatizantes del candidato de izquierda Manuel Andrés López Obrador,
reportó AFP.
La avenida Reforma, columna vertebral de la circulación de
vehículos en México, quedó transformada en peatonal por 8 km.
Los peatones zigzagueaban ante el moderno edificio de la bolsa de
México entre carpas y carteles que decían "No al fraude electoral" y
pedían un nuevo conteo "voto por voto".
López Obrador advirtió el domingo ante centenares de miles de
partidarios que los 47 campamentos diseminados por la ciudad no serán
levantados hasta que el Tribunal Electoral no ordene un nuevo conteo
de los votos.
Un retrato del conservador Felipe Calderón —supuesto vencedor de
las elecciones según el Instituto Federal Electoral (IFE)— es exhibido
con la leyenda "No pasarás".
Jesús Mendoza, chofer de taxi, de 38 años, soporta los problemas
del tráfico sin quejarse. Es seguidor de López Obrador y su Partido de
la Revolución Democrática, y teme que el Gobierno federal envíe a las
fuerzas policiales a sacar a los piquetes de manifestantes.
"Seguro que va a haber algún enfrentamiento", predice.
Sin embargo, el alcalde de México, del mismo partido que López
Obrador, prometió que la policía no desalojará a los manifestantes.
Según Patricia Rodríguez, una madre de 45 años, los bloqueos
molestan sobre todo a la elite económica del país y a la clase
media-alta: "La mayoría de la gente humilde no tiene coche, toman el
metro o los `peseros' (minibuses), no son tan afectados como los que
tienen coche", afirma.
Los dos anillos de circulación periférica están afectados junto a
otras vías por efecto indirecto de los bloqueos en el centro. Los
canales mexicanos repasan las imágenes de embotellajes monstruosos
provocados por el movimiento de "resistencia civil pacífica".
López Obrador y su equipo pasaron la noche en una carpa amarilla
—el color de su partido— en la plaza del Zócalo, centro de la capital.
Por su parte, el Partido de Acción Nacional (PAN), de Felipe
Calderón, ganador de las elecciones impugnadas por el PRD, condenó la
ocupación del centro de México.
Ante la catedral metropolitana se instalaron 31 campamentos
representando a los 31 estados de la federación mexicana.
Y en la avenida Juárez, las carpas donde duermen los manifestantes
contrastan con el lujo del hotel Sheraton.
Militantes del Partido del Trabajo, formación aliada al PRD, se
relevaban para bloquear el acceso a la calle Reforma, sobre la cual
atravesaron un autobús. "Nos quedaremos para apoyar a López Obrador el
tiempo necesario, que sea, un día, dos días, una semana, un mes",
afirma Lauro Martínez. |