WASHINGTON, 27 de junio (PL).—
Unos dos mil millones de dólares aportados por los contribuyentes
estadounidenses para los damnificados por el huracán Katrina fueron
dilapidados en operaciones fraudulentas, destaca hoy el diario The
New York Times.
De acuerdo con el rotativo, los
turbios manejos de los fondos asignados a las víctimas del meteoro
han derivado "en una de las mayores chapucerías burocráticas
de la historia moderna".
Ejemplo de ello, señala el Times,
son los casi 500 millones de dólares destinados a la construcción
de miles casas rodantes, las cuales fueron fabricadas y permanecen
vacías.
Algo similar ocurrió con los 416 mil
dólares asignados a la rehabilitación de una clausurada base del
Ejército en Alabama, que supuestamente sería utilizada como
refugio para los evacuados.
"El fraude ruidoso... la balanza
de pérdidas simplemente es impresionante", afirmó la senadora
republicana Susan Collins, presidenta del Comité de Asuntos
Gubernamental de la Cámara alta.
En días recientes, el propio The New
York Times denunció que casi un cuarto de la ayuda destinada a las
víctimas de los huracanes Katrina y Rita fue a manos de
damnificados ficticios, en una cadena de pagos fraudulentos.
Según una investigación del
Congreso citada por el rotativo, de los mil 400 millones de dólares
aprobados por el legislativo para compensar los daños de los
meteoros, una buena parte tuvo como destinatarios a artistas y otras
personas que no la merecían.
Durante la pesquisa se descubrió que
un supuesto damnificado permaneció casi dos meses en un hotel de
Hawaii, donde pagó 100 dólares cada noche.
Al mismo tiempo, esa persona recibió
dos mil 358 dólares de ayuda federal por los supuestos daños que
tuvo su vivienda.
Los fondos de emergencia también
pagaron boletos para partidos de fútbol, una semana de vacaciones
en el Caribe, incluso una botella de champaña Don Perignon al
precio de 200 dólares.
Unos cinco millones de dólares
quedaron en los bolsillos de personas que reportaron como sus
lugares de residencia cementerios o apartados postales.
La Agencia Federal para el Control de
Emergencias (FEMA) destinó asistencia monetaria para más de mil
presos. Uno de los reos utilizó una casilla de correo para
recolectar cerca de 20 mil dólares.
Los investigadores del Congreso
determinaron que algunos prisioneros realmente tuvieron propiedades
que destruyó el huracán, pero la mayoría no era elegible para
recibir ayuda.
En abril último una auditoria del
Departamento de Seguridad Interna confirmó que la FEMA malgastó
más de mil millones de dólares a raíz del huracán Katrina.
La institución gubernamental
despilfarró los capitales en operaciones infructíferas para
proporcionar hogares temporales a miles de evacuados después del
ciclón de agosto de 2005.