Con saldos muy favorables a la
economía cubana la empresa de Cepillos y Artículos Plásticos Juan
Manuel Márquez (CEPIL), de Ciego de Ávila, recupera el principal
material que se utiliza en el proceso fabril.
En los últimos 18 meses esta entidad
ahorró al país más de 40 mil dólares, al incorporar de nuevo a
la producción la resina plástica.
Yolanda Aguilera, ingeniera química
de CEPIL, señaló que la colocación de mallas más finas en un
molino permite triturar mejor los residuales resultantes del proceso
productivo.
Precisó que esa innovación, puesta
en práctica hace más de un año, facilita aprovechar el 90 por
ciento del material que anteriormente era desechado.
Con ello, puntualizó, se reduce la
cantidad de resina importada, de la cual una tonelada cuesta a Cuba
mil 500 dólares.
Estas acciones forman parte de la
prioridad que le da el país al ahorro para obtener más
producciones con un óptimo aprovechamiento de los recursos
materiales y humanos.
La fábrica, fundada el 13 de febrero
de 1963 por el Comandante Ernesto Che Guevara, es una de las tres de
referencia en la provincia en materia energética y se caracteriza
por las cualidades de sus artículos.
Entre ellas destacan los utensilios
de higiene bucal y variedades de cepillos e hisopos de uso
doméstico e industrial.
La fábrica Juan Antonio Márquez
aplica desde el 2001 el sistema de gestión de la calidad, aval que
junto al trabajo en equipos le permite mostrar una imagen de
vanguardia entre los colectivos del sector.
(AIN)