Fugaz visita de Bush a Bagdad
ELSON CONCEPCIÓN
PÉREZ
elson.cp@granma.cip.cu
Nadie piense que lo hizo
por remordimiento ante la sangre derramada de los propios ciudadanos
norteamericanos en el país del Golfo.
Sonrisa para las cámaras.
Bush fue a Bagdad en
busca de votos. Desesperado por levantar presión ante las encuestas
cada vez más negativas.
Son muchos los frentes
adversos a causa de su torpe política. Mentiras por allá, embustes
por acá; torturas, cárceles secretas, suicidios en la base ilegal
de Guantánamo, caos militar, económico, político y gubernamental
en Iraq; en fin, el mandatario norteamericano quiere, con acciones
más mediáticas que reales, mejorar su imagen perdida.
Una visita relámpago a
la superprotegida zona verde de Bagdad, tiene el propósito de
influir en los propios Estados Unidos y el resto del mundo, en
momentos en que la política del imperio va cuesta abajo.
La misteriosa visita —saturada
de publicidad después de la llegada— solo ocupó unas cinco horas
de Bush para oír de sus anfitriones impuestos el "compromiso a
acabar con el terrorismo".
En su reunión con el
primer ministro Nuri al-Maliki, en un palacio donde está
actualmente la embajada estadounidense, oyó de este la sintética
frase de "Qué bueno verlo''. Al-Maliki, se había enterado de la
llegada de Bush apenas minutos antes.
El Primer Ministro —que
se supone sea quien gobierne en Iraq—había sido invitado a la
embajada bajo el pretexto de participar en una videoconferencia con
Bush, que supuestamente estaba en la residencia presidencial en Camp
David, en Estados Unidos.
Es la segunda vez que el
mandatario norteamericano viaja a Bagdad, y vale recordar que en la
anterior, en el 2003, se reunió con los soldados estadounidenses
para el Día de Acción de Gracias. ¿Recuerdan el pavo plástico y
mediático, que el Presidente de Estados Unidos "compartió" con sus
soldados?
También recordemos que
en aquella ocasión Bush no salió del aeropuerto de Bagdad y su
visita se mantuvo en secreto hasta que estuvo a salvo en el vuelo de
regreso a casa.
Ahora, su presencia
fugaz en Bagdad resultó más de lo mismo. |