Un sostenido trabajo a favor del
entorno permitió a la Empresa de Proyectos de Arquitectura e
Ingeniería de Villa Clara (EMPROY) ser la primera entidad cubana
del Ministerio de la Construcción en lograr el sello de
Reconocimiento Ambiental.
Diseñar y asesorar un cambio
constructivo sostenible del entorno sobre la base de un sistema de
calidad, resultan carta de triunfo de este colectivo profesional,
único de Villa Clara con el galardón que otorga el Ministerio de
Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente.
Idania Gallardo, coordinara ambiental
de la EMPROY, dijo a la AIN que se estableció un programa de
gestión ambiental con acciones dirigidas a la capacitación de
directivos y trabajadores, mientras el análisis en beneficio del
medio resultó herramienta para proyectistas en todos los servicios
y el funcionamiento interno.
Agregó que el reconocimiento
significa un compromiso, pues esta entidad constituye parte
importante del proceso inversionista en el país y le corresponde
contribuir al desarrollo sostenible a partir de las soluciones a
proyectos de viales, hoteles para el turismo, edificaciones de
centros de salud y viviendas.
Como parte de los méritos de la
empresa sobresale la coautoría en el proyecto del pedraplén
Caibarién-Cayo Santa María, ganador del Premio Iberoamericano
Puente de Alcántara, que cuenta entre sus virtudes con el cuidado
de la naturaleza.
El colectivo de la EMPROY obtuvo
también el Premio Nacional de Medio Ambiente del 2001, otorgado por
el Ministerio de la Construcción por el diseño de la instalación
turística Villa Las Brujas, y el de Calidad, al Aeropuerto,
ubicados ambos en la cayería nordeste de la provincia.
En el territorio villaclareño
alrededor de una veintena de entidades transitan por los diferentes
pasos del proceso de Reconocimiento Ambiental en pos de un mejor
desempeño en relación con el entorno y un mejoramiento de las
condiciones laborales. (AIN)