Emplazo a Bush en primer lugar, a ese ladronzuelo, a la CIA, a las 33 agencias de inteligencia y a miles de bancos que hay en el mundo a probar lo que dicen aquí (tomó el ejemplar de la revista Forbes en sus manos), a que encuentren una cuenta a mi nombre en el exterior, de 900 millones de 500 millones, o de un solo dólar, expresó el Comandante en Jefe Fidel Castro al concluir su comparecencia televisiva en la que desenmascaró la infamia de la revista Forbes, que lo ubica como uno de los presidentes más ricos del mundo.

El Comandante en Jefe expresó que le regalaría al imperio todo lo que ha pretendido, eliminarme mediante los miles de planes de atentados preparados, financiados y auspiciados por los gobiernos estadounidenses, y no han podido; apartarme de la dirección de la Revolución, no han podido. "Le regaló todo eso. Si prueban que tengo un solo dólar renuncio a mi cargo y a las funciones que estoy desempeñando, ya no le harían falta ni planes, ni transiciones, si prueban que tengo un solo dólar, dijo enfáticamente el líder de la Revolución cubana.

Pensaron que no habría argumentos, que nos callaríamos la boca, pero se confundieron, se equivocaron, expresó.

Leyó lo publicado en varios medios de prensa que rebotaron la infamia de Forbes, y al respecto comentó que mientras se publican mentiras deliberadas, no dicen nada de los casi 20 000 estudiantes latinoamericanos de medicina que se preparan en Cuba; o de que en este país se formarán casi 100 000 médicos en los próximos años.

Calificó a la revista Forbes de libelo asqueroso de la extrema derecha de Estados Unidos, que se las ha arreglado con estas mentiras para adquirir cierta notoriedad. Su dueño, de posiciones extremadamente conservadoras, es un multimillonario republicano con vínculos con los gobiernos norteamericanos y con la mafia cubano-americana radicada en ese país, explicó.

El tema Cuba en esa revista se enfoca con la promoción de campañas cínicas contra nuestro país. Resaltó Fidel que mientras se publican esas infamias contra Cuba y sus dirigentes, el país está trabajando en un programa que hará posible que cinco millones de latinoamericanos sean operados de la vista, y se refirió a que nuestro programa de educación es reconocido por todo el mundo, y agregó que nuestro país ofreció a Estados Unidos 2 500 médicos para ayudar a salvar vidas cuando el huracán Katrina azotó el sur de ese país.

Más adelante enfatizó en que nuestro país es una potencia oftalmológica. Somos también una potencia genética, pues tenemos más genetistas que todo el resto de América Latina en su conjunto, recalcó.

Ofrecimos operar de la vista a 100 000 norteamericanos que se quedan ciegos porque en aquella sociedad el que no tiene dinero no se puede operar, dijo el Presidente Cubano.

Al destacar la solidaria ayuda prestada a la población de Paquistán afectada por un terremoto, dijo que Cuba, además, había donado 30 hospitales a ese país.

Europa y Estados Unidos juntos no pueden enviar 2 500 médicos a Paquistán, cifra que Cuba envió, y destacó que el propio presidente paquistaní reconoció que los médicos cubanos habían atendido el 70% de la población afectada.

Sobre las mentiras divulgadas intencionalmente por el libelo estadounidense Forbes, dijo que lo quieren pintar como uno de los tantos ladrones que ellos amamantaron, y preguntó ¿dónde está el dinero que todos los gobernantes ladrones llevaron a Estados Unidos?

No conocen a este país, ni a su Revolución, dijo, y añadió que apoderarse de un solo centavo sería traicionar a los muertos del Moncada, del Granma, de la Sierra, de Girón, a los caídos en los actos terroristas cometidos contra nuestro país. Sería traicionar a generaciones enteras que lucharon en este país para mejorar la calidad de vida del pueblo.

Nuestro pueblo conoce a sus dirigentes y sabe de las mentiras del imperio. Hablan de una fortuna. ¡Qué estupidez! exclamó Fidel, quien se preguntó, dónde están los herederos.

Se preguntó que para que querría esos millones que le adjudican. Expresó que nunca le interesaron, y ahora menos, porque "me he atrincherado en ese principio y no lo abandonaré, como a ningún otro".

Insistió en el inmenso capital humano de Cuba, ese que ha sido capaz de sin avanzar a una sociedad de consumo, prestar servicios que no se encuentran hoy en ningún lugar del mundo, y citó por ejemplo la esperanza de vida al nacer, que en nuestro país es hoy de 78 años, y no tardaremos tres años en llevarla hasta los 80.