Las calumnias y provocaciones de la
revista Forbes de que el presidente cubano, Fidel Castro, es el
séptimo gobernante más rico del mundo es una evidente acción de
los Servicios de Inteligencia de Estados Unidos, dijo Francisco
Soberón, presidente del Banco Central de Cuba (BCC), durante una
comparencia especial por televisión del líder de la Revolución,
que se efectúa en estos momentos.
Es algo que no debe quedar sin
respuesta, agregó, pues con ello buscan titulares, y mencionó
algunos, para crear cápsulas de información que puedan ser
tragados por algunos sin ni siquiera darse cuenta.
El dirigente del BCC recordó que
Steve Forbes fue designado en 1985 por el entonces presidente Ronald
Reagan como presidente de la Junta de Trasmisiones Internacionales,
y dirigió emisoras para Europa, destinadas a contribuir a la
desaparición del Socialismo, parecidas a "Radio Martí".
Forbes fue ratificado en el puesto
por Bush padre hasta que se consideró útil, y en 1996 y 2000
resultó candidato a la presidencia por el Partido Republicano.
Es significativo que el señor Forbes
no se fije en su fortuna: 1 839 millones de dólares, más otras
propiedades, acotó.
Al Forbes hacer sus cálculos sobre
la supuesta fortuna de Fidel, en lo cual han tenido en cuenta, entre
otros aspectos, el Producto Interno Bruto (PIB), nos hace pensar que
es difícil pensar en algo que pueda ser más burdo y ridículo.
"Es una calumnia inventada de
principio a fin", señaló.
Si se le aplicaran a Bush los
métodos de cálculo utilizados con Fidel se llegaría a la
conclusión que el presidente estadounidense ganaría 50 mil
millones de dólares al año.
Bush, en cambio, se ha caracterizado
por negocios fraudulentos: con 600 000 dólares compró un equipo de
béisbol de las Grandes Ligas valorado en 10,1 millones de dólares,
los Rancheros de Texas, lo cual fue solo un tímido comienzo.
Se ha demostró también su falta de
capacidad para trabajar dentro de la legalidad, dijo, y recordó su
vínculo con la corporación Enron, acusada de un fraude de gran
magnitud.
Soberón concluyó diciendo que con
absoluta autoridad moral, y mirando de frente a nuestro pueblo, y a
la opinión pública internacional, podía decir que el compañero
Fidel es un ejemplo de pulcritud en este mundo actual en que el
imperio ha sumido a la humanidad.