NACIONES UNIDAS, 26 de abril (PL).
— La Organización
de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura
(FAO)
aseguró hoy que más de 15 millones de personas en el Cuerno
Africano corren el riesgo de perder sus medios de subsistencia
debido a la severa sequía.
Otros ocho millones dependen de ayuda
de emergencia alimentaria y de otros suministros para sobrevivir,
señaló la FAO al lanzar un llamado por 11 millones de dólares
para respaldar sus programas vinculados con actividades agrícolas
en Eritrea, Djibouti y Kenya.
Esta agencia de la ONU reclamó de la
comunidad internacional otros 11,6 millones de dólares para
Somalia.
La directora de Operaciones de
Emergencia de la FAO, Anne M. Bauer, dijo que ese organismo —junto
a la comunidad internacional— desempeñará un papel esencial en
la ayuda a esos Estados.
La funcionaria precisó que se trata
de restaurar los medios de vida de los pastores y asegurar que la
población vulnerable alcance sus necesidades nutricionales.
La declaración emitida hoy por la
FAO es parte de una serie de recientes alertas sobre la compleja
situación en esa región africana, adonde anoche llegó el enviado
especial del Secretario General, el ex primer ministro noruego Kjell
Magne Bondevik, en gira de una semana.
La tarea de Bondevik será valorar
sobre el terreno la situación y sostener intercambios con
representantes de gobiernos, agencias de Naciones Unidas y entidades
asociadas que cooperan con las ayudas de emergencia en esa región.
Organismos de la ONU han precisado
que los pastores y las comunidades agropecuarias son forzados a
trasladarse a lugares muy alejados para poder alimentar a sus
animales y que los campesinos cada vez consiguen cosechas más
mermadas.
La falta de agua reduce las cosechas
y esta situación ha ocasionado una tremenda subida de los precios
de los productos alimentarios, en especial los cereales, indicaron.
Sin asistencia internacional, muchos
de los habitantes de los países del Cuerno Africano enfrentan
desnutrición, crecientes riesgos de enfermedades, pérdida de
medios de vida e incluso la muerte, insisten funcionarios de las
Naciones Unidas.
Dijeron que algunas lluvias en áreas
del norte y el este de Kenya, el sur y el este de Etiopía y el sur
de Somalia mejoraron las existencias de agua y dieron cierta
esperanza de una mejoría de los pasos en próximas semanas.
La llegada de esas lluvias no es el
fin del problema, muchos animales debilitados por la sequía serán
ahora vulnerables a los parásitos y otras infecciones con la
súbita aparición del pasto y se podría perder más ganado,
advirtieron expertos de la FAO.
Señalaron asimismo que incluso con
un período de lluvias normales se necesitarían años para la
recuperación de los rebaños a niveles que puedan ofrecer a sus
dueños medios adecuados de vida.
Las comunidades vulnerables, que ya
sufren años de sequía y conductas erráticas de lluvias por debajo
de las tasas normales, necesitarán continuado apoyo y asistencia de
desarrollo durante esos años cruciales, agregaron los
especialistas.