LONDRES, 12 de abril (PL).—
La reforma del sistema de Salud, defendida a capa y espada por el
primer ministro británico, Tony Blair, dejará un saldo de 100 mil
desocupados, revela hoy el diario The Guardian.
De acuerdo con el tanque pensante
Reform, citado por el periódico, esa transformación, que Blair
pretende dejar como el más visible legado de su gestión en tres
mandatos en el Gobierno, ocasionará una severa alza del desempleo
en ese sector.
Las advertencias de esa institución
de análisis político coinciden con la organización por el Primer
Ministro de un seminario para explicar las supuestas bondades de su
propuesta.
Para ello, Blair invitó el jefe del
Servicio Nacional de Salud (NHS, por sus siglas en inglés), Sir Ian
Carruthers, para explicar los planes de eliminación del déficit
fiscal en esa esfera en los próximos 12 meses.
Solo en las últimas seis semanas la
dirección de varias instituciones médicas anunció el despido de
siete mil empleados. El más reciente caso se registró en el
hospital West Hertfordshire, el cual informó la cesantía de 500 de
sus trabajadores.
El Primer Ministro plantea la reforma
como una supuesta vía para agilizar y mejorar el servicio médico,
cuya situación es muy criticada por los británicos.