Dijo que hubo un avance palpable en la producción de bienes y servicios, algo que no tuvo lugar produciendo automóviles, ni bombas, ni aviones para matar personas.

Los Estados Unidos fabrican bombas mientras dilapidan un presupuesto de 500 000 millones de dólares y tiene un déficit de más de un millón de millones, porque gasta más de lo que produce. En contraste, Cuba ha realizado más de 200 000 operaciones de la vista gratuitamente, en el 2005.

Apuntó que es incalculable el valor de la Misión Milagro, mediante la cual se atienden miles y miles de personas aquejadas de varias enfermedades gratuitamente. Y sentenció que nos duele tanto la muerte de un niño de Bolivia o de Timor Leste como la muerte de una niña o una madre en Cuba. Agregó que hoy tenemos la posibilidad de aumentar las perspectivas de vida de nuestros compatriotas hasta los 80 años, y aseguró que Cuba está demostrando que con un mínimo de recursos se puede dar un apoyo a los países de América Latina y el Tercer Mundo.

De vuelta al tema del I Clásico de Béisbol, apuntó que no habían bastado las miles de medallas ganadas en estos años de Revolución y fue necesario ir al Clásico para demostrar nuestra fuerza en el béisbol. Nuestro país apoya en el Tercer Mundo a los países de menos recursos, pero a los que poseen mayores recursos que Cuba se les brindan servicios compensados.

No necesitamos hacer política con el deporte. Hemos dejado al campo al adversario, aseguró Fidel. Podemos decirle a este poderosísimo imperio que ya se jugó el noveno inning, que tenemos varias carreras de ventaja y somos "home club", una buena situación para responder al bloqueo y a las amenazas. En ningún terreno pueden con Cuba, ocupar este país es imposible. El pueblo de Cuba se ha ganado la medalla de oro por su capacidad de resistir cualquier agresión y no tenemos armas nucleares para defendernos, ni armas químicas ni biológicas, sencillamente no las necesitamos.