NUEVA GERONA.—Merecidas palmas ganó en distintos
escenarios de la Isla de la Juventud el grupo matancero de danza
contemporánea Corpus, en su debut en este territorio, cuyo
público acogió con beneplácito sus propuestas Experimentación
y Veinte años no es nada.
Tanto en la sala Caribe como a lo largo del paseo
Martí, donde compartió con el dúo local Índigo, el
colectivo visitante mostró su versatilidad y altura, así como la
armonía lograda con el elenco del patio, en una combinación que
enriqueció la espiritualidad de ambos conjuntos cuando fusionaron
gestualidad, música, teatralidad y virtuosismo, según los
especialistas.
José Ángel Carret, director de los mencionados
artistas de la llamada Atenas de Cuba, subrayó ese mutuo
descubrimiento como una excelente posibilidad de creación y
quehacer que se remontan a los espectáculos compartidos antes en la
provincia de los visitantes y en Guantánamo.
Con cinco años de creada, Corpus lo integran
ocho bailarines formados en escuelas de arte en especialidades como
ballet clásico y folclórico, entre otras, quienes ya se preparan
para participar en el Festival Danza Callejera, que auspicia Danza
Retazos, de La Habana, y en las Romerías de Mayo, que celebra
Holguín.