WASHINGTON, 15 de febrero (PL).—
El gobierno del presidente George W. Bush solicitará 75 millones de
dólares al Congreso, suma que sería destinada a forzar un cambio
político en Irán, anunció hoy el Departamento de Estado.
Según informó el portavoz Sean
McCormack, la millonaria cifra se utilizaría en financiar "la
promoción de la democracia" en la república islámica.
El dinero se añadiría el
presupuesto federal del año fiscal 2006, para pagar transmisiones
de radio y televisión hacia Irán, país al que Washington pretende
obligar a que abandone su programa nuclear, aún cuando Teherán
asegura que tiene fines pacíficos.
Este miércoles, el general iraní
Yahya Rahim Safavi, jefe de la milicia popular Guardianes de la
Revolución, afirmó que la nación está dispuesta a responder a
una eventual acción militar norteamericana.
Estados Unidos y la Unión Europea
cuestionan el programa nuclear de Teherán y presionan para llevar
el tema al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
La víspera, un sondeo del diario USA
Today y la consultora Gallup arrojó que la mayoría de los
estadounidenses teme que la Administración Bush actúe prematura o
irreflexivamente contra el gobierno y pueblo iraníes.
De acuerdo con un sondeo, muchos
norteamericanos están preocupados por la confrontación verbal
entre Teherán y Washington, sobre un supuesto desarrollo ilegal de
tecnología atómica en el país asiático.
Siete de cada 10 ciudadanos
consultados afirmaron temer que Estados Unidos proceda con
precipitación, y reconocen que se trata de un dilema político de
peligrosa perspectiva.
El 55 por ciento de los encuestados
opinó que a la Casa Blanca le falta confianza y habilidad para
ocuparse de la polémica con la república islámica.