Científicos cubanos desarrollan
inventivas para obtener tecnologías sostenibles, en aras de
combatir el efecto nocivo de la sequía sobre la agricultura urbana
y atenuar el creciente avance de la desertificación.
El estudio estuvo a cargo de
especialistas del Instituto de Ciencia Animal (ICA), ubicado en el
municipio habanero de San José de Las Lajas e inaugurado en 1965
por el Comandante en Jefe Fidel Castro.
María Felicia Díaz, especialista
del ICA, explicó que se trabaja en la producción de
variedades similares al Cuba CT-115, pasto altamente resistente a
los períodos secos, el cual se adapta de forma exitosa a las
condiciones climáticas de México, Colombia y Guatemala.
Aseveró que la entidad cubana
realiza también investigaciones para lograr plantas resistentes a
la salinidad, fenómeno que afecta a las provincias orientales,
fundamentalmente a Holguín, Las Tunas y Guantánamo.
De acuerdo con la especialista, se
ejecutan además sistemas de tecnologías integrales, encaminados a
alcanzar un equilibrio ecológico y sustentable de suelos y
cultivos.
Desde su fundación hace 40 años, el
Instituto de Ciencia Animal se ha dedicado al estudio de
alternativas alimentarias, manejo y genética animal para Cuba y el
área tropical.
Su misión es generar, desarrollar y
transferir las mejores y más rentables tecnologías en el campo de
la producción agropecuaria tropical mediante la investigación, el
extensionismo, la capacitación, la divulgación y la colaboración
eficiente.
En la referida institución laboran
75 investigadores altamente calificados, de ellos 44 doctores en
Ciencias, quienes han realizado varios estudios relacionados con el
desarrollo integral de la ganadería cubana.
Especial atención han prestado a los
recientes progresos biotecnológicos en la producción de nuevos
alimentos para el ganado, así como también los que han conducido a
la obtención de nuevos clones de pastos y forrajes, entre otros
logros. (AIN)