BAGDAD, 13 de enero (PL).—
Por lo menos dos policías iraquíes murieron y otros seis
recibieron lesiones hoy en un atentado de la resistencia con carro
bomba en la ciudad nororiental de Baquba, informó una fuente
oficial.
Las primeras versiones sobre el hecho
indicaron que el vehículo dinamitero fue activado por control
remoto al paso de una patrulla y que la explosión también hirió a
un transeúnte.
Baquba es la capital de la provincia
norteña iraquí de Diyala y los servicios de inteligencia militar
norteamericanos le califican de feudo de la insurgencia.
Esa es una de las primeras
operaciones armadas ocurridas tras la celebración islámica del Eid
al Adha (Fiesta del Sacrificio).
El retorno de la violencia, luego de
unas jornadas de pocas actividades beligerantes, continúa
generalizando la situación de caos, fundamentalmente en las
regiones septentrional y central.
Se presume que a partir de divulgarse
los resultados de las legislativas, las tensiones se dispararán en
flecha entre las formaciones que participaron por sus comunidades en
la consulta.
La jefatura de las tropas de
ocupación estadounidenses admitió que la violencia aumentará en
Iraq cuando tales datos se hagan públicos y se den pasos concretos
para establecer el perseguido gobierno de unidad nacional.
No obstante, la violencia no
abandonó a Iraq en este período. Desde el 15 de diciembre hasta
ahora se reportó más de medio millar de muertos.
Para el general Donald Alston,
portavoz de la jefatura estadounidense, ese dato confirma la
tendencia al incremento de las operaciones en declaraciones
reproducidas este viernes por la prensa.
Fuentes cercanas a la comisión
electoral indicaron que las estadísticas finales del escrutinio
podrán difundirse a partir del próximo domingo.
Los pronósticos indicaron que los
políticos de la comunidad islámica chiíta obtendrían la mayoría
de los escaños y con esa facultad impondrían sus criterios de
convertir a Iraq de hecho en una federación, lo cual rechazan los
musulmanes sunitas.