WASHINGTON, 22 de noviembre (PL).—
Cargos de pagos excesivos y amiguismo han surgido en la Costa del
Golfo estadounidense, donde el fraude financiero ensombrece la
reconstrucción de las zonas afectadas por el huracán Katrina,
destacó hoy el diario The New York Times.
Sobre el tema, el rotativo consideró
que la política de la Casa Blanca debería ser la de evitar cometer
los mismos errores que empañaron la denominada reconstrucción de
Iraq, rodeada por la fraudulencia y la especulación en cuanto a los
contratos para la participación en ese proceso.
La semana pasada fueron presentados
cargos ante la corte federal contra Robert Stein (hijo), acusado de
cometer varios delitos mientras se desempeñaba como funcionario
financiero de las autoridades de la ocupación estadounidense en el
país árabe.
Según la acusación, Stein habría
aceptado más de 200 mil dólares mensuales para facilitar contratos
a empresarios norteamericanos cuyas compañías realizaban
generalmente un pobre trabajo, y en varias ocasiones ninguno.
El funcionario fue designado para el
puesto pese a ser condenado por un delito grave relacionado con
fraude en 1996 y despedido de su empleo en 2002 por falsificación
de registros de nóminas y facturas, precisa The Times.
Sin embargo, el gobierno
norteamericano lo envió para trabajar en los proyectos de
reconstrucción en las ciudades iraquíes de Hilla y Karbala, con 82
millones en fondos de los contribuyentes.
Pero las irregularidades financieras
de Estados Unidos en el país árabe no se limitan al caso de Stein.
Funcionarios de la Oficina del
Inspector General Especial para la Reconstrucción de Iraq
aseguraron que actualmente procesan otros 50 casos, y remitieron al
menos seis a los fiscales, asegura el diario.
Mientras, todavía no ha sido
nombrado un inspector general con mandato amplio para revisar los
contratos vinculados con las operaciones de recuperación de los
devastadores efectos causados por Katrina.
Por su parte, el gobierno federal
concedió "más del 80 por ciento de los contratos, con un
monto de mil 500 millones de dólares firmados sólo por la Agencia
Federal para la Gestión de Urgencias (FEMA), a dedo o mediante
concurso restringido" en la zona de Nueva Orleans, reporta el
diario.
Las empresas que participan en la
reconstrucción (el Shaw Group y Kellogg, Borwn Root) son filiales
de Halliburton, grupo antes dirigido por el vicepresidente de
Estados Unidos, Dick Cheney, y en que figura como representante en
Washington Joe Allbaugh, ex director de la campaña electoral del
presidente George W. Bush y de la FEMA.