Gran júbilo
ha causado en Cuba el triunfo del actor cubano Manuel Porto, quien
ganó el premio a la mejor actuación masculina en el recientemente
finalizado festival de cine de Trieste, Italia.
El jurado que recompensó el trabajo del actor
expresó en su dictamen: "Recibe el premio por su papel en que
da vida a un personaje fuera de todos los esquemas, soportando la
responsabilidad del filme de principio a fin sin clichés de
actuación".
En conversación con Prensa Latina, Eduardo Moya,
considerado el mejor director de televisión en la Isla, dijo que se
sentía muy feliz del triunfo de Porto, a quien él descubrió para
el arte en las filas del servicio militar en la década del 60 del
pasado siglo.
"Manuel Porto es un magnífico actor de
carácter que pertenece a la pléyade de grandes protagonistas
cubanos de finales de los 60, junto a Rogelio Blaín, Enrique Molina
y Agustín Benítez, entre otros", agregó.
Por su parte Rogelio Blaín, uno de los gigantes del
cine y la televisión cubana, afirmó que "Porto no sólo es su
amigo, sino uno de sus actores preferidos".
Manuel Porto triunfó con un papel en la cinta
Habana, del joven director de cine venezolano Alberto Arvelo, a
quien llaman el "Steven Soderbergh de los llanos" y quien
hizo la excelente Una casa con vista al mar.
Esa cinta, la más galardonada en la historia del
cine venezolano, recibió el Premio del público en Biarritz, Mejor
Película del Festival de Oslo y Mejor Director en el Festival
Latinoamericano de Nueva York, entre otros lauros.
Por su parte, Porto, quien ha trabajado en grandes
teleseries de la televisión cubana, también fue uno de los
protagonistas de Se permuta, el primer largometraje de Juan Carlos
Tabío (Fresa y chocolate).
Este actor quien se desempeña como director del
grupo de teatro Korimakao que actúa en la Ciénaga de Zapata en el
occidente de la isla, combatió en la guerra de Angola de 1977 a
1979.