AMMÁN, 10 de noviembre (PL).—
Los servicios de seguridad jordanos arrestaron hoy a varios
sospechosos de ejecutar tres atentados en esta capital, en los
cuales murieron casi 60 personas y más de un centenar resultaron
heridas, informó la televisión estatal.
El hecho ocurrió anoche y es
considerado el más violento en la historia de este país árabe.
Entre los muertos se identificaron 15
jordanos y 11 extranjeros, dijeron fuentes médicas citadas por la
televisión.
Las bombas fueron colocadas en los
hoteles Radisson SAS, Hyatt y Days Inn, frecuentados por ciudadanos
israelíes.
En el Radisson un hombre con un
cinturón de explosivos ceñido a su cuerpo voló en pedazos en
medio de un salón de baile donde se efectuaba una boda.
Otro suicida hizo lo mismo en la
entrada de Hyatt y un tercero hizo saltar por los aires un
automóvil cargado de dinamita en el Days Inn.
Las instalaciones están rodeadas por
barreras metálicas y sus accesos eran controlados por el ejército.
Este jueves, los ministerios,
escuelas y todos los establecimientos públicos amanecieron cerrados
y se decretó duelo nacional.
Por su parte, el comisario jefe
Bashir Daija, portavoz del Departamento de Seguridad Pública,
explicó que se desconoce si los autores son nacionales o
extranjeros.
Daija dijo que no se tuvo
información previa a los actos violentos, y anunció la reapertura
de las fronteras terrestres aéreas y marítimas del país, pero con
rigurosas medidas de seguridad.
El rey Abdala II, quien se encontraba
de visita oficial en Kazajastán, regresó de inmediato y prometió
castigar a los responsables de los ataques.
Televisoras regionales comentaron que
las causas de los atentados podrían encontrarse en la alianza de
Jordania con Estados Unidos e Israel.