Sellos sobre visita a Cuba de Albert Einstein
Alexis
Schlachter
El
Ministerio de la Informática y las Comunicaciones puso en
circulación tras la cancelación este jueves, dos sellos
conmemorativos del aniversario 75 de la breve estancia en la capital
cubana del genial físico alemán Albert Einstein. La firma de las
estampillas se realizó en el Ministerio de Ciencia, Tecnología y
Medio Ambiente como parte de los actos con los cuales la comunidad
científica internacional conmemora este año el centenario de la
publicación del revelador y polémico artículo de Einstein sobre
realidades inesperadas en la Física que dieron paso más tarde a
los procesos nucleares y energéticos contemporáneos.
Tenía 51 años de edad
el físico alemán cuando el 19 de diciembre de 1930 tocó puerto
habanero el vapor Belgenland, a bordo del cual viajaba junto a su
esposa, y asombró a todos no solo por su fama científica sino,
además, por sus deseos de conocer la realidad social de Cuba,
único país de nuestra América que visitó.
La primera visita
oficial fue para intercambiar con los miembros de la Academia de
Ciencias Médicas, Físicas y Naturales, donde hoy se encuentra el
Museo de las Ciencias Carlos J. Finlay.
Einstein recibió allí
un homenaje coauspiciado por la Sociedad de Geografía; más tarde,
de la Comunidad Hebrea de Cuba, y también de la Sociedad Cubana de
Ingenieros. Además realizó recorridos por el Acueducto de Vento y
la Escuela Técnica Industrial.
El Nobel de Física de
1921 comenzó a adentrarse en la triste realidad cubana de la época
de Gerardo Machado cuando se le informó que no podría visitar a la
Universidad de La Habana, clausurada por orden del Gobierno. Y
declinó la invitación oficial para hospedarse en el Hotel
Nacional, entonces el más lujoso del país; decidió pasar la noche
en el vapor donde viajaba.
En su diario personal el
sabio anotaría más tarde cuál era la verdad de la sociedad cubana
de 1930: "Clubes lujosos al lado de una pobreza atroz que afecta
principalmente a las personas de color". |