|
Por primera vez cine
egipcio
Pedro
de la Hoz
Por
primera vez el público cubano accederá a una muestra de cine
egipcio cuando a partir del próximo viernes en la sala Chaplin, de
la Cinemateca de Cuba, se exhiba un ciclo de siete películas de ese
país árabe.
El director de Los sueños de Hind y Camilia, Mohamed Khan, estudió y ejerció la crítica de cine en Londres antes de reinstalarse en su país en 1977. Es uno de los realizadores egipcios de mayor reputación por su cine de proyección social.
Materializado gracias a
un proyecto de colaboración entre el ICAIC y la misión
diplomática de El Cairo en La Habana, la Semana de Cine Egipcio
comenzará con la exhibición el día 16, a las 8:30 p.m., de Los
sueños de Hind y Camilia (1989), de Mohamed Khan, y proseguirá
con El diario de un fiscal rural (1968), de Tewfik Saleh; El
cartero (1968) y Algo de temor (1969), de Hussein Kamal; El
imperio de Satanás (1986), de Salah Abouseif; La visita del
Presidente (1994), de Mounir Radi; y El capitán (1990),
de Sayed Said.
El embajador de Egipto,
Abdel Fattah Ezzeldin, declaró a la prensa que se trataba de una
magnífica oportunidad para los cinéfilos de un pueblo como el
cubano que cuenta con un elevado nivel cultural, y ofreció
información sobre la producción fílmica actual en su país —entre
12 y 15 largometrajes al año, luego de haber llegado a un centenar
cinco décadas atrás— y del gusto de los egipcios por verse
reflejados en la pantalla, aun cuando las maneras de Hollywood y de
Bollywood (el melodrama indio convencional de factura industrial)
copen las salas.
Egipto vio cine casi
desde los días de la invención de los Lumiere y filmó su primera
película, Laila, de Ahmed Galal, en 1927. Junto a Argelia y
a Marruecos, ocupa un lugar privilegiado en las cinematografías
árabes. Sus íconos en Occidente son el actor Omar Sharif y el
director Yussef Chahin.
|