MANAGUA, 22 de julio (PL).— Una comisión del Congreso unicameral, continúa hoy la recolección de pruebas para un posible desafuero del presidente nicaragüense, Enrique Bolaños, por delitos electorales.

El mandatario fue citado este viernes, por segunda ocasión, a testificar pero rehusó asistir.

La víspera dijo que es un ciudadano "limpio de culpa", lo que fue apoyado por especialistas de la Organización de Estados Americanos (OEA), que indagaron sobre esos hechos.

Bolaños insistió en que ya expuso por los medios de difusión "todo lo que tenía que decir" sobre el juicio político que tratan de hacerle quienes lo adversan.

Pero el contralor Guillermo Argüello Poessy reconoció que a nombre de Bolaños se abrieron cuentas bancarias en la Isla de Gran Caimán, aunque se desconoce el origen de los recursos allí depositados.

Hasta ahora, dijo, no se ha podido averiguar ni detectar quiénes fueron los aportadores de más de 12 millones de córdobas (unos 770 mil dólares) depositados en el Banco Calley Dagnal.

Tampoco se ha podido conocer el origen de los aportes a otras dos cuentas que suman más de ocho millones de dólares y otros fondos, añadió la fuente.

La legisladora Mirna Rosales, presidenta de la comisión, explicó que la ausencia de Bolaños "no perjudica el avance de las indagaciones".

Aclaró que todo funcionario público debe declarar sus bienes ante la Contraloría General de la República (CGR).

En este caso, como supuestamente el dinero vino a la campaña electoral, debieron reportarlos para pagar ante la Dirección General de Ingresos los respectivos impuestos, añadió.

Se espera que este viernes testifiquen Arturo Harding y Leonardo Somarriba, ministro y viceministro del Ambiente y Recursos Naturales (MARENA), respectivamente.

Confirmó que el 3 de agosto próximo concluye el período de pruebas y se pasará a elaborar el dictamen que será presentado al plenario a fines del próximo mes.