LIMA, 20 de julio (PL).—
El transporte público de la capital del Perú está casi paralizado
hoy por una huelga de 24 horas de los gremios del sector en demanda
de rebajas de los precios del combustible.
Los primeros informes de la mañana
indican que la mayoría de las rutas de ómnibus acataron la
protesta, con la cual demandan además la reducción de los altos
costos del seguro obligatorio contra accidentes de tránsito.
En algunos puntos de la ciudad
pequeños grupos de personas lanzaron neumáticos a las vías y
luego los incendiaron, e incluso en zonas de los suburbios del sur
otros tiraron piedras a los pocos vehículos que circulan.
La situación es aprovechada por
conductores particulares que se dedican a trasladar a los pasajeros
a altos precios, que en ocasiones triplican el precio normal.
Las autoridades dispusieron el empleo
de vehículos para enfrentar la situación, entre ellos camiones de
la policía y el funcionamiento de un moderno tren eléctrico,
habitualmente paralizado por falta de financiamiento.
Los gremios del transporte, que
agrupan a más de 300 empresas, anunciaron una
marcha por las calles de Lima.