NACIONES UNIDAS, 5 de abril (PL).— El secretario general de la ONU, Kofi Annan, reiteró hoy su expectativa de llegar hasta el fondo de las alegaciones en torno al programa Petróleo por alimentos para Iraq.

Annan dialogó aquí con todo el personal de la sede central, en la sala principal de plenarias, donde fue recibido con una ovación en señal de respaldo a su ejecutoria.

"Sé que esto echó una sombra sobre todos nosotros", dijo en referencia a la investigación que realiza un panel independiente en torno a irregularidades en el referido programa.

Añadió que había experimentado dolor personal como secretario general y como padre, en alusión a su hijo Kojo, señalado por sus vínculos con la empresa suiza Cotecna, que obtuvo un contrato relacionado con el mencionado programa.

Sin embargo, el segundo reporte emitido hace pocas semanas por el grupo indagador encabezado por Paul Vocker, eximió de toda responsabilidad al número uno de la ONU respecto a la exclusiva concedida a Cotecna.

En otra parte de su comparecencia puso énfasis en las propuestas de reforma de la organización mundial, y la intención de establecer un comité de supervisión que garantice recomendaciones hechas para la oficina de control interno (OIAS).

También anunció la creación de una junta, monitora de la actuación de los ejecutivos del sistema para que rindan cuenta de casos de hostigamientos y la circulación de directivas en ese sentido a todo el personal.

Reafirmó asimismo la aplicación de una fuerte política para enfrentar incorrectas conductas sexuales, como las que salieron a la luz pública en la misión de cascos azules en Congo Democrático.