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Todos Estrellas de Granma Si de batear se trata SIGFREDO BARROS
Algunas posiciones no tienen discusión. A pesar de que en la receptoría hubo hombres con destaque —Pestano, por ejemplo, promedió 331, con 11 jonrones y 72 remolques—, el espirituano Eriel Sánchez se llevó las palmas con su coliderato de carreras impulsadas, 87, y sus 25 cuatriesquinazos, además de solo poncharse en 22 ocasiones. Mucha más complicación encontré para seleccionar el primera base. Orlis Díaz (el de mejor promedio, 350), Loidel Chapellí, Ariel Borrero, los tres con excelentes campañas. Pero, entre todos, sobresalieron Joan Carlos Pedroso y Antonio Scull, el primero con su liderato de cuadrangulares y el segundo empatado con Eriel en el de impulsadas. Cabría preguntarse: ¿qué es más importante para un equipo, un hombre capaz de sacar más pelotas que otros fuera de los límites o uno que traiga mayor cantidad de compañeros hacia el plato? Mi voto para Scull quien, además, remolcó 56 corredores en posición anotadora y 25 veces la de la ventaja o el empate, por 24 y 14 Pedroso y se ponchó 10 turnos menos. En la intermedia destacaron varios nombres, entre ellos el veterano Alex Ramos y el joven camagüeyano Yusquiel García. Pero los números del tunero Danel Castro son incomparables: 103 jits, 24 tubeyes, 17 jonrones, 64 impulsadas, 73 anotadas y 27 veces remolcando empate o victoria, líder de su equipo y entre los mejores del torneo.
En la antesala hubo un "monstruo" llamado Yulieski Gourriel, frente al cual todos los demás empequeñecieron, con lideratos en jits y carreras anotadas, una menos que los dos punteros en impulsadas y 341 de average, una de las mejores campañas de infilder alguno en la historia de las Series Nacionales, la cual le ganó —en mi opinión—, la distinción de Jugador Más Valioso. En el campo corto no sucedió lo que en otras posiciones, pues pocos torpederos sobresalieron en el uso del madero. Con más de un tercio de temporada desempeñándose en esa posición y estadísticas muy llamativas (319, 114 jits, 56 anotadas, 58 impulsadas, 23 dobletes), las palmas para el habanista Michel Rodríguez. En los jardines resulta de obligado cumplimiento comenzar por el tunero Osmani Urrutia, el único hombre en nuestro béisbol con 5 campeonatos de bateo consecutivos. Detrás clasifican Yoandry Urgellés, segundo de los bateadores por dos años en fila y otro zurdo, Andy Zamora, con 67 anotadas, 50 remolques y 346. Como designado, Luis Ignacio González, sin sombras a su lado, y como mejor utility Manuel Benavides, quien jugó segunda, tercera, short y los tres jardines, conectó 119 jits y 23 dobles, anotó 63 carreras y fletó 45 compañeros. Lanzadores derechos hubo muchos con rendimiento más que suficiente. Entre todos, Yadel Martí ganó 11 y perdió solo 2, fue tercero en promedio (y primero entre los abridores), con 2 limpias exactas en 117 innings de labor. De los zurdos escogí a Ramón Licor, el máximo ganador entre los tiradores de esa mano y de los relevistas, ninguno brilló como Yolexis Ulacia, amparado en sus 10 triunfos, 11 salvados y 1.66 de PCL. Por último, me resta seleccionar al Novato del Año. Afortunadamente para nuestro béisbol, esta fue una temporada de agradables sorpresas, de varios debutantes con calidad. Pero hay que seleccionar a uno y ese es Yadier Pedroso, a quien mucho le debe el Habana estar discutiendo la final. Menciones para otro Vaquero, Yusdel Tuero, y para el granmense Alfredo Despaigne, un jardinero que conectó 100 jits, 10 jonrones, promedió 313, anotó 58 carreras e impulsó 41. Hasta aquí la selección. Volveré a las andadas con el conglomerado estelar a la hora de fildear. Más información en: www.granma.cubaweb.cu/eventos/44serie/playoff/ |
Iba
a resultar extraordinariamente difícil dar a conocer nuestro Todos
Estrellas —ofensivo y defensivo—, en medio del fragor de la
postemporada. Pero este compás de espera hasta la reanudación de
la final mañana miércoles nos brinda la oportunidad de, como todos
los años, ofrecerles nuestras consideraciones acerca de quiénes
pudieran ser los integrantes del equipo estelar a la hora de batear.
Scull, indiscutible en la inicial.
Pestano, sin duda, como receptor.
