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Temas de play off ¿Avispas o Aplanadoras? SIGFREDO BARROS Todavía recuerdo con caracteres indelebles el cuadrangular de Antonio Pacheco por el jardín derecho, ante un Guillermón Moncada repleto, para decidirle a Pedro Luis Lazo y a Pinar del Río la XL Serie Nacional de Béisbol. Fue algo así como el canto de cisne de una gloriosa generación de peloteros santiagueros —encabezada por el Capitán de Capitanes y formada, entre otros por Orestes Kindelán, Fausto Álvarez y Gabriel Pierre—, la cual colmó de alegría a cientos de miles de sus parciales.
La retirada de todos ellos, unos primero, otros después, descorazonó un tanto a sus seguidores. Tres temporadas consecutivas sin llegar a discutir un título. Y una reciente amarga experiencia, cuando fallaron inexplicablemente al borde de la clasificación. A Santiago, al parecer, le quedaban años de espera. Pero una nueva generación ha llegado. Y a los veteranos como Benavides, Isaac, Reutilio y Meriño se les han sumado Luis Miguel Navas, Héctor Olivera, Alexei Bell, Ronnier Mustelier, Danny Betancourt, Alberto Bicet, Alexander Jorge y demás, para conformar un nuevo equipo. Efectuados los dos primeros juegos de la semifinal oriental, sus posibilidades de llegar a la final son enormes. No solo por las dos victorias en sí, sino por la forma en que se han facturado. Las estadísticas —siempre elocuentes—, dicen que en los tres últimos enfrentamientos (el último versus Granma y los dos primeros ante los Naranjas), las Avispas han marcado 36 carreras y han conectado 46 indiscutibles de todos los tamaños en 109 turnos oficiales, para un astronómico 422 de promedio. Se despidieron de los Alazanes con un nocao y recibieron a los villaclareños con otro. Se me antoja pensar que lo mejor del segundo encuentro fue ver a los bateadores indómitos no tratar de halar los incómodos lanzamientos laterales de quien es el mejor relevista del béisbol cubano en estos momentos, Yolexis Ulacia, un hombre que finalizó la XLIV Serie con 1,67 de promedio y virtualmente resultó imbateable en el cotejo vs Ciego de Ávila. Le dejaron llegar la pelota y la empujaron, de tal forma que, de ocho jits aceptados por Yolexis, siete fueron hacia los territorios del jardín central y el derecho. Mencioné en un anterior comentario la preocupación ante la inefectividad de Danny Betancourt y la incógnita que sigue siendo Norge Luis Vera. En esta su segunda salida, el ídolo de Siboney trabajó con mucho mejor control, aunque su promedio de velocidad —86 a 88 millas—, aún está unas cinco millas por debajo de lo que en él es habitual. Afortunadamente para el mentor Antonio Pacheco, tanto Alberto Bicet como Osmel Cintra siguen caminando por la senda del hermetismo. Apoyados por la que hasta ahora ha resultado una ofensiva despiadada, las Avispas están a punto de convertirse en aquella Aplanadora orgullo de todos los orientales. Más información en: http://www.granma.cubaweb.cu/eventos/44serie/playoff/ |
Alexander Jorge, un coloso a la defensa y muy bien a la ofensiva.
