Ricardo Alarcón, Presidente del
Parlamento cubano, denunció hoy las torturas y malos tratos que se
comenten contra los detenidos que tiene el gobierno norteamericano
en la ilegal Base Naval de Guantánamo.
El Jefe del Legislativo antillano
presentó en el otrora círculo
infantil Le Van Tan, que sufrió un abominable atentado terrorista
en 1980, los capítulos I y IV del libro Cuba y los
Derechos Humanos.
Al responder a una pregunta de la
AIN, Alarcón significó que el trato degradante que da Washington a
las personas presas en ese enclave militar, usurpado a la Isla, es
una completa transgresión de los derechos más elementales, pues no
han sido acusadas de nada ni cuentan con un debido proceso.
Señaló que esos detenidos, a los
que la Casa Blanca llama combatientes ilegales, se encuentran allí
secuestrados, y ni siquiera se conocen sus nombres.
Al comentar los capítulos del
mencionado libro expresó que la política norteamericana ha
perseguido como meta anticipar el fin de la Revolución cubana, como
se describe en el llamado Plan de Asistencia a una Cuba Libre, que
calificó de verdadera declaración de guerra.
Manifestó que la única
Superpotencia del planeta se ha valido no solo de la coerción
económica, política y propagandística contra el país, sino que
ha acudido al terrorismo como arma privilegiada contra la Ínsula.
Denunció que los EE.UU. busca un
país patrocinador para la resolución anticubana en la Comisión de
Derechos Humanos de Ginebra y que no existe ninguna justificación
para ello como no sea para discutir, analizar y condenar las
violaciones en la ilegal Base Naval de Guantánamo.
Apuntó que confía que los gobiernos
de América Latina emitan su voto conforme a principios sagrados
tales como el respeto a la independencia y el de la igualdad
soberana de los Estados y tomen en cuenta el sentir de sus pueblos.
(AIN)