GINEBRA, 15 de marzo (PL).—
Brasil señaló hoy que existen retrocesos en la defensa de los
derechos humanos en el sistema de Naciones Unidas, por el
incumplimiento de compromisos asumidos y la politización creciente
sobre esos temas.
Al hablar ante la Comisión de
Derechos Humanos (CDH) de la ONU, Nilmario Miranda, secretario
encargado de esa cartera, con rango ministerial, reclamó el
cumplimiento de los acuerdos adoptados en la Cumbre de Durban contra
el racismo.
Miranda recordó que hace 12 años
tenía lugar en Viena la conferencia mundial sobre derechos del
hombre, y mucho de lo aprobado entonces quedó en el papel.
Luego mencionó la Cumbre del Milenio
y criticó el terreno perdido en la cooperación Norte-Sur, en
particular la participación de los países ricos en el desarrollo
del Tercer Mundo.
"Nos preocupa el exceso nivel de
politización y selectividad que centra el trabajo de la Comisión
sobre determinados países, dijo, en coincidencia con otros
delegados del Tercer Mundo que hicieron uso de la palabra".
Brasil quiere que se tome en cuenta
su postura para que la CDH no deje de emitir un mensaje claro sobre
su transformación, apuntó.
En torno a los resultados de un panel
de alto nivel que propuso cambios en el sistema de la ONU, subrayó
que su informe hizo señalamientos respecto a la perdida de
credibilidad y los dobles raseros que imperan en la CDH.
Una de las propuestas de ese grupo
fue la elaboración de un reporte mundial sobre el estado anual de
los derechos humanos.
Al respecto el brasileño afirmó que
deberían incluirse los que apuntan al bienestar socioeconómico,
cultural y al desarrollo de todos los pueblos.
También defendió la necesidad de la
objetividad de la Comisión al adoptar decisiones que llevan
implícitos enfoques parcializados y tienden a la confrontación.
En el orden interno, Miranda explicó
los esfuerzos del gobierno que preside Luiz Inacio Lula da Silva por
asegurar la alimentación de los sectores más pobres de su país.
De igual manera refirió los
propósitos por defender los derechos de la niñez, erradicar el
analfabetismo en ese sector poblacional, la violencia y la
explotación laboral y sexual.
Deploró el asesinato de una
misionera estadounidense en el estado de Pará y dijo que el hecho
enfatiza los retos del ejecutivo brasileño por erradicar la
impunidad y mejorar la actuación de las fuerzas policiales y de
seguridad.
En el plano regional habló de la
coincidencia entre los países del Mercado del Sur por cooperar en
favor de la verdad y la memoria, para que no se repitan las
violaciones cometidas por los gobiernos de facto.
Brasil es miembro de la CDH, y su
mandato debe concluir este año.
Otros 10 países latinoamericanos
conforman la Comisión, de los cuales cinco son sudamericanos, dos
centroamericanos, Cuba y Dominicana por el Caribe, además de
México.