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Exagerado despliegue de fuerzas para toma de posesión de Bush WASHINGTON, 18 de enero.—Cuando el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, jure su segundo mandato, mañana, hasta 200 manzanas del centro de Washington estarán completamente cerradas o tendrán un acceso restringido, y al menos 3 000 agentes de policía se incorporarán de otros distritos, reporta DPA.
Este será el juramento presidencial con la seguridad más extrema en los 229 años de historia del país, y constituye la primera asunción de un Presidente desde los atentados del 11 de septiembre del 2001. Una cifra exagerada de perros adiestrados del ejército, expertos en explosivos y otros especialistas inspeccionarán la zona. La policía montada y soldados de infantería con fusiles de asalto y lentes de visión nocturna vigilarán el área en prevención de un ataque. Marines entrenados para actuar en caso de ataques biológicos o químicos, así como ingenieros militares expertos en rescates de edificios que están a punto de derrumbarse estarán alerta para el peor de los casos. Las agencias del Gobierno han pasado más de un año desarrollando planes de seguridad, independientemente del resultado de los comicios. Mientras Bush cree que el acto "es un blanco atractivo para los terroristas", y así lo dijo en una entrevista recientemente concedida al diario The Washington Post, el secretario de Seguridad Nacional, Tom Ridge, ha reconocido que el Gobierno no tiene conocimiento de una amenaza terrorista creíble de cara a la toma de posesión del Presidente. A la gente que trabaja cerca de la Casa Blanca o a lo largo del recorrido que hará la comitiva presidencial, ya se le ha dicho qué puertas de los edificios emplearán y qué es lo que podrán llevar consigo. Algunas calles se preveía serían cortadas días antes, y estaciones de metro cerradas el jueves. Lo que sí parece más probable son acciones de protesta a lo largo de la Avenida Pennsylvania, por donde desfilará el Presidente desde el edificio del Capitolio. Todos recuerdan que cuando Bush juró el cargo hace cuatro años, a la caravana presidencial le lanzaron huevos. La Red Contra la Guerra en la capital espera poder difundir la desobediencia civil y llevará a cabo una manifestación desde un parque cercano hasta el centro de la ciudad, donde tienen previsto tumbarse en la calle. Otro grupo, Resistencia Anarquista, anunció a través de su página web una manifestación y descalificó la asunción como "una de las grandes ceremonias de la clase dominante". Los funcionarios en la capital tendrán libre el jueves, y se estima que las pérdidas por dejar de trabajar asciendan a 66 millones de dólares. |
Habrá 3 000 agentes de policía más de otros lugares.
