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Reclama Cuba que naciones ricas abran sus mercados a países insulares PORT LOUIS, Mauricio, 13 de enero.— Los países ricos deben abrir sus mercados a las producciones de los pequeños estados insulares, y se debe reconocer verdaderamente la vulnerabilidad de este grupo de países en el seno de la Organización Mundial de Comercio (OMC), reclamó Cuba en esta capital. Al intervenir aquí en la Reunión Internacional para el Examen del Programa de Acción de Barbados para el Desarrollo Sostenible de los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo, el ministro de Gobierno de Cuba, Ricardo Cabrisas, afirmó que la OMC debería aplicar normas justas de trato especial y diferenciado. Esperamos, destacó, que esta reunión promueva fórmulas nuevas, concretas, no condicionadas y objetivas, dirigidas a solucionar nuestros acuciantes problemas de desarrollo económico, social y ambiental. "No podemos sentirnos satisfechos hasta que construyamos un mundo mejor, que es posible, donde primen la solidaridad, la cooperación internacional entre las naciones y sobre todo el respeto y la igualdad", enfatizó. "A diez años de la Conferencia de Barbados, en la cual nos trazamos un grupo importante de metas y objetivos para el desarrollo sostenible en los Pequeños Estados Insulares, denunció Cuba, los desafíos que enfrentan nuestros países son cada vez más complejos." Actualmente, aseguró Cabrisas, la mayor limitación de los pequeños Estados insulares está directamente relacionada con la escasez de recursos financieros, lo que agrava su vulnerabilidad. La Ayuda Oficial al Desarrollo, dijo, solo alcanza el 0,22% del PNB del mundo desarrollado, o sea, menos de la tercera parte de lo comprometido hace ya 34 años. Estados Unidos, el país más industrializado del mundo, ejemplificó, posee el triste récord del más bajo índice de Ayuda Oficial al Desarrollo: solo un 0,11% de su PNB. "La tendencia de los fondos provenientes de la comunidad internacional, dijo, es disminuir drásticamente, y en su concepción predomina un enfoque bilateral que se sustenta, en muchos casos, en condicionamientos que laceran la soberanía e independencia de los países receptores." Al respecto, prosiguió, mi delegación expresa una vez más su enérgico rechazo a las medidas unilaterales y extraterritoriales contra países del Sur, violatorias del Derecho Internacional y de las normas más elementales de convivencia entre Estados. Esas acciones, prosiguió, dificultan y limitan el cumplimiento de los planes y prioridades de desarrollo de los países afectados, y atentan contra el logro de los objetivos de desarrollo aprobados por las conferencias y cumbres internacionales de las Naciones Unidas. "Cuba, pequeño país insular en desarrollo, ejemplificó, se encuentra sometida a la más brutal y duradera agresión económica, comercial y financiera que haya conocido la historia, la que ha sido condenada sin ambages durante 13 años consecutivos por la Asamblea General de la ONU." En la reunión de Mauricio, Cuba resaltó, además, la necesidad de que, ante las afectaciones del maremoto en Asia, la comunidad internacional brinde toda la ayuda necesaria para superar la tragedia. Al mismo tiempo, reclamó Cabrisas, se debe de encarar científica y seriamente las investigaciones y previsiones que se requieran para alertar o brindar protección a los pueblos. |
