Transcurre la rendición de cuenta en diez provincias

María Julia Mayoral

La presente rendición de cuenta de los delegados municipales debe ayudar a fortalecer el vínculo con el pueblo, brindar información al sistema del Poder Popular acerca de las inquietudes, insatisfacciones y sugerencias de los ciudadanos, y servir para dar a conocer la atención dada a los planteamientos de los electores, opina el secretario de la Asamblea Nacional, Ernesto Suárez.

Hasta el momento, el proceso tiene lugar en diez provincias, y a partir de los primeros días de noviembre comenzará en La Habana, Villa Clara, Las Tunas, Ciego de Ávila y el Municipio Especial Isla de la Juventud.

Precisamos, indica Suárez, que en cada localidad se realice una evaluación objetiva y profunda de cómo fueron atendidas las cuestiones expresadas por los electores en las anteriores asambleas de rendición de cuenta. Muchas dificultades, comenta, no han podido solucionarse debido a los problemas económicos del país; por esa razón en ningún lugar puede faltar la argumentación precisa, y la exigencia de los delegados por que les sean explicados todos los pormenores de cada caso, pues ellos no pueden ser portadores de respuestas formales, que no convencen a nadie.

Siempre será necesario insistir sobre estas cosas; y no se trata solo de preparar mejor a los delegados, sino también a las administraciones, a las asambleas del Poder Popular, a los consejos de la Administración... sostiene el diputado.

A veces, alerta, hay dependencias estatales que dirigen su trabajo a partir solo de criterios económicos y pierden de vista el efecto político asociado a esas decisiones. Sin embargo, la Revolución nos enseña a diario que pese a enormes limitaciones materiales, puede haber mejorías parciales y alternativas para aliviar la situación de la población, siempre y cuando se realicen estudios integrales, sin esquematismos.

Pese a los esfuerzos, numerosos delegados deberán explicar ahora a sus conciudadanos que seguirán pendientes de solución planteamientos anteriores referidos al estado técnico de las viviendas, los viales, el transporte, el abasto de agua... y ello obviamente puede crear insatisfacciones, pero debe prevalecer la confianza en que ninguna de esas necesidades ha quedado ni quedará en el olvido, subraya el Secretario del Parlamento.

En los análisis del Estado y del Gobierno en cada nivel, concluye, son tenidos en cuenta esos reclamos y en la medida de las posibilidades se asignan y continuarán destinando recursos para aliviar o resolver los problemas expuestos por los electores.

 

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