OSLO, 26 de octubre (PL).
— El gobierno de Noruega admitió hoy que prestó armamentos a
Estados Unidos con el conocimiento de que podían ser usados en la
invasión a Iraq, una acción calificada de espeluznante por la
oposición.
En declaraciones a la televisión
pública, el ministro de Asuntos Exteriores noruego, Jan Petersen,
afirmó que se accedió a un pedido en ese sentido hecho por el
gobierno estadounidense.
Al respecto, Petersen puntualizó que
cuando un aliado hace una solicitud de ese tipo, se le responde
positivamente.
También afirmó que aunque la
administración noruega estaba consciente de que esa agresión
contravenía el derecho internacional por no contar con el aval de
la ONU, eso no era impedimento para rechazar la solicitud.
Ese proceder fue fuertemente
criticado por el opositor partido Izquierda Socialista que lo
calificó de espeluznante.
Noruega figuró entre los estados
europeos que rechazaban la intervención anglo-estadounidense en
suelo iraquí sin la aprobación del Consejo de Seguridad.
Pero tras la invasión registrada en
marzo de 2003, también contestó afirmativamente a otra solicitud
de Washington y se sumó a los países que desplazaron tropas en ese
territorio con el simbólico envío de 179 militares.