BAGDAD, 25 de octubre (PL).—
Un soldado de Estonia perdió la vida y otros cinco recibieron
lesiones al estallar una bomba al paso de su vehículo en una calle
de la capital iraquí, Bagdad.
Este es el segundo soldado de ese
país del Báltico que perece aquí, donde integró la coalición
militar internacional pronorteamericana de ocupación.
La baja fue identificada como Arre
Illenzeer, de 28 años de edad, que realizaba un recorrido en el
vehículo de la unidad Estpla-9, bajo el cual detonó la bomba.
Un vocero del destacamento estonio
(45 soldados), confirmó lo ocurrido contra el equipo que cumplía
una misión de vigilancia en un sector de la capital, el cual no
precisó el vocero.
Por otra parte, medios de prensa
destacaron la desaparición de cerca de 400 toneladas de explosivos
de arsenales custodiados por las tropas norteamericanas en el
complejo de Al Qaqaa.
Las combinaciones clasificadas como
RDX y HMX tienen la capacidad de destrozar completamente edificios
y, según expertos de la ONU, podrían potenciar la creación de un
arma nuclear.
Anteriormente, especialistas de esa
organización aseguraron que no había evidencias de que el gobierno
de Saddam Hussein tuviera armas de destrucción masiva ni capacidad
para fabricar engendros nucleares.
Esos explosivos desaparecieron de la
antigua instalación militar iraquí ubicada al sur de Bagdad,
complejo de instalaciones que se halla bajo control de las fuerzas
de ocupación estadounidenses.
El egipcio Mohammed El Baradei,
director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA),
notificaría este lunes al Consejo de Seguridad de las Naciones
Unidas sobre la falta de las casi 400 toneladas de las letales
sustancias de los arsenales.