GAZA, 14 de octubre.— Cinco
palestinos murieron en la continuación de los ataques israelíes
este jueves mientras oficiales superiores del ejército de Tel Aviv
se interrogan sobre la utilidad de continuar el operativo en curso
en la franja de Gaza.
Ya "es tiempo de ponerle
fin" para evitar "complicaciones", señalan los
oficiales, según informó este jueves el diario israelí Maariv,
dice AFP.
"La continuación de la
operación ya no aporta nada más y podría sólo llevar a
complicaciones", confió al diario Maariv un oficial superior
cuya identidad no fue precisada.
"Cada día que pasa hace más
grave la situación humanitaria en el norte de la franja de Gaza y
mientras tanto los palestinos estudian los métodos de acción del
ejército, la posición que ocupa en Jabaliya, Beit Lahya y Beit
Hanun, lo que podría poner a nuestros soldados en peligro de
ataques", dijo el oficial.
Un anciano palestino de 70 años,
gravemente herido el jueves en la madrugada en un ataque aéreo
israelí contra Rafah, al sur de la franja de Gaza, falleció,
llevando a tres el número de víctimas fatales de este ataque,
según fuentes de hospitales palestinas.
La víctima es Ismail Assawalhi, y su
esposa, de 65 años, se encuentra gravemente herida.
Anteriormente, los soldados
israelíes mataron a dos palestinos, Ali Chaath, de 19 años, y
Ahmad Dahawi, de 20 años, y otros cuatro resultaron heridos cuando
un helicóptero de asalto disparó un misil contra el campo de
refugiados de Rafah, en el sur de la región.
En este mismo sector, en la noche,
una columna blindada israelí destruyó 16 viviendas antes de
retirarse, según testigos y fuentes de la seguridad palestinas.
Por su lado, un activista del
movimiento Hamas, Nidal Masud, murió como resultado de las heridas
sufridas cuando otro helicóptero de asalto israelí disparó un
cohete cerca de una mezquita situada en pleno centro del campo de
refugiados de Jabaliya, más al norte.
Otro militante de Hamas, Moshieddin
El Mahdmun, de 24 años, pereció en el acto en el mismo ataque.
Estas nuevas víctimas hacen llegar a
124 el número de personas muertas por los soldados israelíes desde
el comienzo de una operación iniciada el 28 de septiembre para
terminar con los disparos de cohetes Qassam contra territorio
israelí.
Un gran número de las víctimas de
esta operación son civiles y entre ellos numerosos niños.
Las organizaciones de las Naciones
Unidas activas en la franja de Gaza advirtieron contra la
posibilidad de una crisis humanitaria en ese territorio, teatro de
violencias y donde la operación israelí actual agravó la
situación.
Desde que comenzó la segunda
Intifada, a fines de septiembre de 2000, han muerto 4 488
personas, de las cuales 3 460 palestinos y 954 israelíes.