JAKARTA, Indonesia, 19 de julio.—
Una fotografía desplegada a cuatro columnas, en la cabeza del
diario Indo Sport, destaca en su edición de hoy el paso
arrollador de la selección cubana femenina de voli en el Grand
Prix.
El comentario Cuba, récord
perfecto, alude a las tres victorias consecutivas de las
antillanas aquí, quienes elevaron a seis la cadena de dominios en
el certamen. La nota habla del momento de la premiación, cuando en
la sala Istora con aforo para 10 000 personas, se le entregó a
Zoila Barros el título de Jugadora Más Valiosa (MVP, siglas en
inglés).
Desde la llegada a esta capital de
las campeonas de la Copa Panamericana, disímiles han sido las
muestras de cariño profesadas hacia ellas por un público halagador
y respetuoso, que en el encuentro contra Japón —con una buena
parte del graderío ocupado por simpatizantes nipones— no dejó de
animar y aplaudir las jugadas de las nuestras.
El primer encuentro con esa
cordialidad de los indonesios lo tuvimos la noche del recibimiento a
las cuatro delegaciones (Rusia, Alemania, Japón y Cuba), en la casa
del Gobierno provincial de Jakarta. Para sorpresa de los presentes,
en medio de una velada cultural en la que disfrutamos de algunos
bailes autóctonos, el propio Gobernador tomó el micrófono e
interpretó dos canciones dedicadas a las voleibolistas.
Jakarta —a pesar de que la
selección de Indonesia no participa en este Grand Prix (GP)— ha
dejado en los visitantes una agradable impresión como organizadora.
El año pasado, ante la epidemia SARS que asoló al continente
asiático, el evento se efectuó en Italia. Los federativos de esta
nación afirman que están en un proceso de revitalización del
voleibol para insertarse en la competencia en un breve lapso.
La selección cubana espera viajar
mañana martes hacia la ciudad sudcoreana de Jiju, donde a partir
del viernes enfrentará a las anfitrionas, otra vez a Japón, y
cerrará contra Brasil, elenco que ha llamado a filas a sus más
connotadas figuras y registra en el GP una actuación sobresaliente.
El cuadro dirigido por Luis Felipe
Calderón y los hermanos Eugenio y Eider George solamente precisa de
un triunfo más (sería el séptimo) para incluirse en la
finalísima de Italia, en la que tomarán parte seis colectivos, a
partir del próximo día 27.
En el Grand Prix del 2000, vísperas
de los Juegos Olímpicos de Sydney, las cubanas ganaron el oro
invictas en 11 salidas al campo y en la cita estival obtuvieron su
tercer título consecutivo. El otro año en que dominaron el GP fue
en 1993, en el nacimiento del clásico.