TEGUCIGALPA, 15 de junio (PL).—
Médicos internos hondureños abandonarán hoy sus labores por
cuatro horas en las salas de emergencia de los principales centros
hospitalarios en demanda por un mayor aumento de salarios.
El paro será progresivo, pues el
gobierno de Ricardo Maduro no ha priorizado los reclamos de los
galenos, quienes se suman a las protestas protagonizadas por
sindicalistas y maestros en virtud de la derogación de un decreto
que congela los aumentos salariales.
Unos 19 maestros y 22 miembros de la
Federación Unitaria de Trabajadores de Honduras (FUTH) permanecen
en huelga de hambre desde este lunes reclamando, además, frenar los
programas gubernamentales tendientes a la privatización de la
educación, entre otros.
Igual que esos sectores de la
sociedad hondureña, los médicos manifestaron su rechazo a la
desatención estatal a sus problemas y al agravamiento de la
compleja situación económica que vive este país, el tercero más
depauperado de Latinoamérica.
Lorenzo Díaz, dirigente de los
especialistas en labor social, señaló que los galenos han
procurado la comunicación con la administración de Maduro desde
que comenzaron a hablar del paro, pero las autoridades no les han
hecho caso.
Les hemos enviado cada una de las
actas que surgen de nuestras asambleas, donde discutimos los
problemas que nos afectan, y tampoco les dan importancia, aseveró.
Arturo Gutiérrez, director de la
Secretaría de Salud, admitió que es posible que las protestas de
los médicos prosigan porque el gobierno no está en condiciones de
realizar nuevos incrementos salariales.
La paralización de las labores en
los centros hospitalarios afectará fundamentalmente a los servicios
de ginecología, pediatría, cirugía y medicina interna, pues el
Estado no los considera prioritarios, según los demandantes.