El vicepresidente primero del INDER,
Christian Jiménez, destacó en Maturín los niveles de entrega y
compromiso con que laboran los colaboradores del deporte cubano en
la República Bolivariana de Venezuela.
"Satisface escuchar los elogios
que reiteran las autoridades locales y las muchas personas que
reciben los beneficios de su trabajo", comentó al cierre de
una intensa jornada en la que intercambió con los compatriotas de
su organismo destacados en los estados de Sucre y Monagas.
Acompañado de otros funcionarios del
INDER y la empresa Cubadeportes, el directivo constató el prestigio
generado por los autores de un quehacer marcadamente humanista que
llega a comunidades y sitios intrincados con la intención de
multiplicar las bondades de la actividad física.
Jiménez escuchó mensajes que
ratifican el apoyo de la misión deportiva cubana a la Revolución y
el Comandante en Jefe Fidel Castro y confirman la disposición de
asumir con entereza esta u otras tareas al tiempo que rechazan la
creciente agresión estadounidense contra la isla.
"Este es un momento especial
para Venezuela, América Latina y Cuba, y ha tocado a ustedes asumir
una misión de la que todos nos sentimos orgullosos", dijo
después de dialogar con entrenadores, metodólogos, médicos,
sicólogos, fisioterapeutas y otros especialistas de la isla.
Impactantes escenas como la de la
abuelita que insiste en agradecer la mejoría de su salud a la
dedicación de un joven terapeuta cienfueguero o la del profesor de
lucha devenido instructor de un círculo de cultura física
confirmaron la valía de una obra que enaltece a sus protagonistas.
Por eso es común en estas tierras
oír hablar del profesor cubano de educación física que atiende a
un club de hipertensos o del vínculo entre sus colegas y los
médicos llegados desde allá, o del especialista en medicina
deportiva que consulta a la población.
Y por eso ganan adeptos que les
reconocen ajenos a cualquier otro interés que no sea contribuir a
un mejor estilo de vida a partir de una labor que nada tiene que ver
con tarifas y descansa en el amor por los demás.
(AIN)