La voz de Camilo un Primero de Mayo
Enrique
Atiénzar Rivero
CAMAGÜEY.—
La conmemoración del Primero de Mayo de 1959 en Camagüey estuvo
encabezada por Camilo Cienfuegos. El desfile partió de la Avenida
de los Mártires, recorrió la céntrica calle República, Ignacio
Agramonte, Cisneros hasta el Casino Campestre, donde 50 000
camagüeyanos festejaron junto al legendario Comandante el Día
Internacional de los Trabajadores.
Fue la primera y única
vez que el jefe guerrillero participó en los festejos de la
memorable fecha obrera, porque cinco meses después sucedió su
trágica muerte al desaparecer el avión Cesna en el cual viajaba de
regreso, el 28 de octubre, desde el aeropuerto Ignacio Agramonte
hasta la capital.
Fueron varios los
oradores en aquella histórica concentración, pero el discurso de
Camilo resultó el más vigoroso, radical y profundo, con una
peculiar vigencia, pues cuando es releído hoy parece estar
concebido para estos tiempos.
Camilo abogó por la
unidad, por seguir la lucha y satisfacer los deseos de los obreros
que querían instrucción militar por la inalterable identidad
ejército-pueblo.
Desde entonces vio que
la Revolución cubana no solo sería el faro de América, sino de
todo el mundo.
Tenía apenas 27 años
cuando desapareció, y como mismo hizo en las montañas y la
invasión, Camilo aglutinó fuerzas a favor de la causa.
Esta unidad que hemos
visto aquí hoy y que la estamos viendo a diario en toda nuestra
Patria, hay que mantenerla a toda costa. Todos los obreros, todos
los trabajadores deben unirse cada día más. La unidad es el
triunfo, sentenció. Trabajadores, ustedes deben estar conscientes
del momento que vivimos, que son muchos los enemigos escondidos y en
espera del momento de atacarnos ¡No se dividan! ¡No podemos
dividirnos! Ejército, pueblo y obreros debemos estar cada día más
unidos, dijo.
Antes nos
preguntábamos: ¿Armas para qué? Hoy decimos, subrayó, que
necesitamos armas para combatir a los contrarrevolucionarios y a los
enemigos de Cuba que intentan arrebatarnos este hermoso triunfo.
Porque sabemos que los obreros, los trabajadores no quieren ver el
regreso de Mujal y su camarilla de ladrones y asesinos.
Cerca del Casino
Campestre, en la Plaza de la Revolución Mayor General Ignacio
Agramonte, los camagüeyanos estarán, el próximo sábado,
recordándolo y haciendo realidad su mandato: Unidad para la
Victoria, porque el mensaje de Camilo sigue teniendo toda
actualidad. |