MADRID, 9 de marzo (PL).—
El presidente del gobierno español, José Maria Aznar, no tuvo
reparos en compararse con el emperador español Carlos V al tratar
de explicar su decisión de retirarse de la vida política activa.
En una entrevista que publica hoy el
diario francés Le Monde, Aznar repasa sus ocho años al frente del
ejecutivo español y reconoce que retirarse es lo mejor que puede
hacer en este momento.
Pero cuando le preguntaron si sabía
de alguien que como él hubiera dejado el poder de forma voluntaria,
se remitió a Cincinnatus, dictador romano que después de conducir
a Roma a la victoria se retiró a una granja, y al emperador Carlos
V, de España, quien tras abdicar se recluyó en la localidad de
Yuste.
Los entrevistadores también le
preguntaron a Aznar por su reconocida falta de carisma, asunto al
cual éste le restó importancia asegurando que es lo mismo que si a
Zidane (estelar futbolista del Real Madrid) se le reprochara por no
tener pelo.
Al respecto aseguró que los líderes
que se necesitan son los que tienen ideas y convicciones y aseguró
que "no hay nada peor que un tipo simpático pero que sea mal
dirigente".
Significativamente, acto seguido se
refirió al presidente francés Jacques Chirac como un jefe de
Estado "muy simpático y con experiencia".
Pero en la entrevista el mandatario
español tampoco se cohibió de arremeter contra sus homólogos
europeos al asegurar que hace mucho que no discuten en sus reuniones
sobre los cambios importantes que tienen que poner en marcha dentro
de la Unión Europea.
En tal sentido aseguró que "en
los últimos tiempos no hablamos prácticamente de nada".