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Entregados premios Espacio' 2003 Iraida Calzadilla Rodríguez Desde que inició los avatares de la publicidad y la propaganda en 1946, los reconocimientos a Mirta Muñiz se han sucedido unos tras otros. Este diciembre vuelve a los fueros de la competencia al alcanzar el grupo de creativos que ella lidera en la Campaña de lanzamiento de los cigarrillos Cohíba de Brascuba Cigarrillos S.A., el Gran Premio Espacio, de la Asociación Cubana de Comunicadores Sociales (ACCS). Ya antes había merecido el Premio Por la Obra de la Vida, el Especial (junto a Hubert Delestre, por el laminario de los Cinco Patriotas), y también otros lauros en el transcurso de las siete ediciones de Espacio. La Asociación Cubana de Comunicadores Sociales otorgó esta vez 31 premios y menciones en más de una decena de categorías. Y hubo dos premios especiales. El primero, para la multimedia Cinco razones para no claudicar, del grupo de creativos de Publicitaria Imágenes, de la Corporación CIMEX. Yuri Oliver y Luis Cubela, miembros del equipo de realización, comentaron a este diario que se trata de un soporte de apoyo a la campaña a favor de la liberación de nuestros Cinco Héroes, y entre los temas que contiene están el caso de Olga y Adriana, a quienes no se les otorga visas para entrar a Estados Unidos; los carteles de la exposición Por un juicio justo; las pinturas que ilustraron el juicio; una selección de cartas y poemas de ellos y sus familiares; entrevistas a sus más allegados; y fotos inéditas. El segundo Premio Especial Espacio fue para la multimedia Cuba acusa, de Nelson Ponce Sánchez, un joven diseñador de CITMATEL quien por primera vez participa en el certamen y obtuvo, además, otras dos preseas y una mención. Los premios Por la Obra de la Vida fueron otorgados a Enrique Moreno, Wilfredo Benítez, Ángel Álvarez, Pedro A. Nápoles y Julio Simoneau. Presidieron la ceremonia Esteban Lazo, miembro del Buró Político; Rolando Alfonso Borges, jefe del Departamento Ideológico del Comité Central; Tubal Páez, presidente de la Unión de Periodistas, y Rebeca Galán, presidenta de la ACCS. |
